En la última semana varias localidades de Brasil se vieron afectadas por una ola de calor y registraron sensaciones térmicas que superaron los 60ºC. A poco más de un mes de que inicie el verano, el dato encendió las alarmas en Argentina y, especialmente, en Rosario, donde últimamente la temporada estival acechó con altos valores térmicos. Especialistas en meteorología llevaron tranquilidad al asegurar que serán meses con mucha lluvia, lo que refrescará la estación, pero alertaron por la posibilidad de tormentas fuertes en la zona.

En diálogo con Conclusión, el director del Grupo Caza Tormentas del Sur, Oscar Monjelat, habló sobre el verano que se viene en Rosario y expresó: “Vamos a tener altas temperaturas y periodos de refresco. Habrá momentos en los cuales las temperaturas se pueden disparar, como en una ola de calor, donde por varios días vamos a tener temperaturas elevadas, pero siempre llega el refresco”.

Y aclaró: “El refresco, con la instalación de El Niño, va a venir acompañado de tormentas. Cuanta más permanencia de calor tengamos previo a esas tormentas, más fuertes van a ser estos fenómenos, más violentos van a ser los vientos y más actividad eléctrica vamos a tener”.

Al ser consultado sobre el fenómeno registrado en localidades brasileras, donde la sensación térmica superó los 60ºC, Monjelat observó: “Si vamos a nuestra ciudad capital, Santa Fe, también hemos tenido sensaciones térmicas de más de 60ºC. Cuando las temperaturas son normales, pero hay una alta humedad, se dispara la sensación térmica, esto es normal en presencia del fenómeno El Niño”.

Por otro lado, el especialista en meteorología alertó por la posibilidad de que se formen tormentas en la zona: “Cada vez que entramos al verano con el fenómeno de El Niño, esperamos que luego de algunos días de temperaturas elevadas el ciclo termine con la llegada de tormentas. Cuanto más nos cerquemos al verano, las tormentas van a venir con un poco más de peligrosidad. Puede haber lluvias más copiosas y los vientos podrán aumentar su velocidad. También hay que prestar atención a las alertas de granizo, que van a estar a la orden del día”.

Monjelat no descartó que en Rosario y la región se produzca un tornado, al tiempo que, en relación a las lluvias, aseguró que “el mes más complicado va a ser diciembre y parte de enero”, mientras que la situación se irá “acomodando” hacia febrero o marzo con “tormentas menos fuertes”.

Por último, el cazador de tormentas aseguró que el ciclo de lluvias continuará en los próximos meses, siendo la región del Litoral una de las más afectadas.

Por su parte, el integrante del Centro de Monitoreo Meteorológico y Climático SAT, Jorge Giometti, explicó días atrás a Conclusión que la corriente de El Niño empezó a sentirse “fuertemente” desde el mes de agosto en la zona del Litoral, especialmente en las provincias de Misiones y Corrientes, el sur de Brasil y el este de Paraguay y Formosa. Como consecuencia de mayores lluvias en estas regiones, aumentó el caudal de agua en los ríos, que arrastran el excedente hacia el sur de del país.

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“Hasta diciembre, esa área empieza a expandirse. Rosario y la región están incluidos. Vamos a tener una primavera con afectación de débil a moderada y en el verano, de diciembre hasta marzo, vamos a estar con una fuerte afectación de El Niño”, anticipó Giometti.

El especialista en meteorología, además, indicó que en la zona comenzarán a darse ciclos donde “cada seis o siete días habrá alguna tormenta o precipitación”. Esta tendencia se mantendrá por lo que resta de la primavera e incluso se acentuará en el verano y continuará en el otoño.

Al ser consultado sobre qué pasará con las temperaturas en el verano, Giometti apuntó: “Vamos a tener temperaturas muy altas interrumpidas por tormentas fuertes, algunas pueden ser localmente severas con granizo, ráfagas y precipitaciones intensas en corto tiempo. Si vemos la fotografía vamos a tener altas temperaturas con tormenta, pero al analizar la película, es decir, el promedio del verano, vemos que las temperaturas van a estar de normal a por debajo, porque vamos a tener poca insolación por los cielos cubiertos por tormenta y precipitaciones”.