Ya se está por terminar el primer mes de este 2016 y todavía el ambiente es de incertidumbre respecto de la política salarial del año. El gobernador santafesino, Miguel Lifschitz, aseguró que para negociar en las paritarias primero esperan “alguna señal del ámbito nacional” para “tener un piso un poco más firme”, ya que si bien no se han hablado de cifras en sus reuniones informales con dirigentes sindicales, aseguró que los números que se escuchan por parte de funcionarios del gobierno nacional y las de los gremialistas son “muy disímiles”.
“Lamentablemente nadie tiene elementos como para decir cuál de las dos (cifras) es la verdadera o si estamos a mitad de camino, porque no hay índices oficiales y los que teníamos antes quedan un poco cuestionables”, aseguró el jefe del Ejecutivo santafesino, que por esto mismo sostuvo que el marco de incertidumbre es muy grande, y que será muy difícil para evaluar la perspectiva de cara a las negociaciones.
No obstante fue positivo, y confió en que las conversaciones se desarrollen sin conflicto y en corto tiempo, poniendo énfasis también en el sector docente y “los límites que marca el inicio de las clases”.
«Nos gustaría que hubiera alguna señal de la Nación, de otras provincias también, alguna idea de por dónde vamos a empezar a caminar este trayecto de negociaciones salariales, y también algunas definiciones de los gremios más importantes a nivel nacional como para tener algún piso y algún techo, algún margen para empezar a conversar”, sentenció Lifschitz.
El gobernador finalmente aseguró que si bien hay ciertos parámetros para medir lo que fue la inflación en el año 2015, la discusión corre por otro lado, ya que al tener que establecerse la pauta salarial para 2016 se necesita tener alguna estimación de lo que será el impacto inflacionario en el transcurso de estos meses.
