Por Facundo Díaz D’Alessandro
Alberto Fernández volvió a pisar Rosario en la previa de comicios presidenciales, esta vez de las generales del próximo 27 de octubre, como ocurriera días antes de las elecciones primarias que lo dejaron a las puertas del poder, tras sacarle casi 20 puntos al candidato oficialista, el actual presidente Mauricio Macri.
Si esto forma parte una inconfesable cábala, clásica en todos los ámbitos donde exista algún tipo de competencia, lo sabrá el propio Fernández y a lo sumo su entorno cercano; lo que sí puede decirse es que evidentemente se siente contenido por la estructura del PJ santafesino, que volvió a mostrar solidez y mancomunión entre sus figuras, por lo menos en términos de representación, más importantes: el gobernador electo Omar Perotti y María Eugenia Bielsa, y tras ellos todos.
Las diferencias, que las hay, por ahora se reservan sólo a las bases o la intimidad del café. Cuando termine la campaña se verá.
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Además, el candidato a presidente del Frente de Todos aprovechó su paso por la ciudad para volver a sacar chapa de ser «el más federal de los porteños».
En aquella visita de agosto lo hizo firmando un «compromiso» por escrito ante gobernadores (y candidatos a) justicialistas, a instancias de Perotti. El actual senador nacional parece rankear alto en la consideración del ex jefe de Gabinete, quien dijo estar tranquilo porque en la futura mesa de decisiones esté gente como Jorge Capitanich, a quien mencionó como su amigo, como «sin dudas» Omar Perotti, a quien conoce «hace años», desde que era intendente de Rafaela y «junto a Néstor Kirchner» lo destacaban donde fueran. «Sigan el ejemplo de Rafaela», aseguró que decían.
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Esta vez, Rosario fue epicentro de una reunión que juntó a una nutrida cantidad de intendentes del PJ y variantes, para abordar un tema central en la Argentina de hoy, sea por oportunidad proselitista o no, que es el déficit habitacional y la enorme injusticia en el reparto de la tierra en el país, entre otras cosas.
Esa actividad la desarrolló a instancias de María Eugenia Bielsa, quien se movió en todo momento como la coordinadora del grupo, fue quien se sentó a la izquierda del candidato para comunicar «los diagnósticos» y ya asoma como alguien que ocupará algún lugar de peso en esa materia dentro del armado nacional, de confirmarse el resultado de las PASO.
Así, la diferencia sustancial entre ésta y la anterior visita es que no hubo liturgia peronista clásica, acto y movilización masiva, y tampoco estuvo acompañado de su compañera de fórmula Cristina Kirchner.
Sin embargo, la gran ganadora de este proceso eleccionario, en términos de táctica y estrategia política, es (desde el exilio de su tour) omnipresente.
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Proyectada en pantallas gigantes, la senadora nacional y ex presidente sonó estridente por los parlantes del Salón Metropolitano desde el Calafate, donde presentó su libro Sinceramente. En Rosario, la escuchaban, ya sentados en sus lugares, todos los jefes municipales y comunales asistentes, diputados provinciales y nacionales, concejales y referentes peronistas varios, además del público, enfervorizado, cada tanto, en cánticos.
Cuando ya finalizaba el discurso en Santa Cruz, aparecieron a ocupar sus lugares entre la primera fila el diputado nacional Wado de Pedro y Felipe Solá, dos que suenan fuerte para ocupar ministerios a partir del 10 de diciembre, si Fernández es presidente.
Una plataforma que urge
Más allá de que durante una campaña electoral los distintos competidores y frentes políticos que los contienen suelen abocarse a problemas reales (que en la gestión luego suelen omitir), y a la esperanza de construir un país que a muchos les gustaría habitar (¿para qué están las campañas sino?), el Foro de Ciudades, Hábitat y Federalismo que tuvo lugar este lunes en la ciudad pone el foco en algo que verdaderamente traba el desarollo del país, y para lo cual se advierte un abordaje, en el Frente de Todos, más serio a partir de esta iniciativa, a través de algo fundamental para cualquiera que pretenda ser gobierno: una plataforma política para atender esa agenda. Está claro que esto sería apenas un incipiente arranque que deberá consolidarse y ganar densidad.
La garantía de eso pareciera ostentarla hoy por hoy la ex vicegobernadora santafesina María Bielsa. Es quien organizó y trabajó junto a los intendentes, y especialmente, los equipos técnicos, y es además alguien que por su formación académica (arquitecta) y trayectoria política, pareciera amoldarse de forma precisa a la coordinación de tareas de desarrollo urbano.
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Según relató la propia Bielsa, se encontró con Alberto Fernández por segunda vez en su vida antes de las PASO, cuando viajaban «de Rafaela a Esperanza» y empezaron «a hablar de la posibilidad que daba el hábitat, en un sentido amplio, para pensar un territorio diferente, más justo».
«Es una oportunidad única que un candidato se plantee esto, son desafíos del siglo XXI, pensando en calidad de vida, con nuevos desafíos del ambiente, de la recolección de residuos, nuevas formas de habitar la tierra, tecnologías. Me parece que tendríamos que pensar un modelo de país que pueda replantearse a partir de esto», destacó.
«Federal se es no sólo a partir de un presidente y con gobernadores sino también con intendentes, viceintendentes, jefes comunales y concejales. Esta convocatoria fue innovadora e inclusiva. Si lo hicimos en 20 días, en tus manos está la oportunidad de construir un verdadero país federal», concluyó Bielsa, en alusión al candidato presidencial.
En ese sentido, el gobernador electo santafesino y actual senador nacional Omar Perotti, sostuvo: «Nos toca a todos una gran responsabilidad en este momento para concretar este sueño que han despertado Alberto y Cristina de poner de pie a la Argentina. Federalismo es una de las palabras con las que Alberto convocó a gobernadores y está estrechamente vinculado a la descentralización del poder. O tenemos organización unitaria o es federal».
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Y profundizó: «Para terminar con esta vergüenza que es el hambre en Argentina, debe trabajar el estado con sus tres niveles organizados. Allí es donde hoy han podido trabajar. La presencia en el territorio será de gran importancia.»
Por último, tras reafirmar que «el federalismo es necesario para rehacer una patria», refirió a un tema al que suele temerse hacer referencia desde el peronismo, como es el «trabajo del futuro».
«Es una discusión que tenemos que dar, no regalárselas, para que pase sin que reaccionemos. Somos nosotros desde el justicialismo los que tenemos que generar las condiciones para que pequeñas y medianas empresas puedan salir a a mercados del mundo. Todo será fundamental para estructurar desde allí una plena instancia participativa», concluyó.
