Tras 15 meses de obras finalmente hoy quedó inaugurada la nueva cárcel de mujeres, ubicada en 27 de Febrero al 7800.
Con gran expectativa, los ministros de Seguridad Maximiliano Pullaro y de Obras Públicas Pedro Morini, junto al gobernador Miguel Lifschitz y el secretario de Coordinación del Ministerio de Seguridad, Pablo Cococcioni brindaron una conferencia de prensa para presentar las flamantes instalaciones.
> Te puede interesar: Denuncian falta de agua y luz y serias falencias en la nueva cárcel de mujeres
“Estamos concretando un paso más en el plan de obra pública carcelaria que lleva adelante la provincia de Santa Fe dando lugar a la primera cárcel de mujeres que se construye como tal en la provincia”, dijo a Conclusión Cococcioni.
Con un total de 131 plazas, la nueva cárcel contará además con un pabellón especial para alojar a 11 mujeres con niños menores de cinco años, y un espacio de recreación. 
“Hoy, del 93% de la gente privada de su libertad está alojada en servicios penitenciarios como establece la ley. Además una población penal que ha crecido, en vez de 4.600 detenidos hay 6.200, con lo cual la obra pública ha tenido que hacer un esfuerzo para dar grandes saltos como este”, destacó el coordinador de Seguridad.
En ese sentido, valoró la labor provincial que ha marcado “un proceso sin precedentes en nuestro país. Se han empezado y terminado unidades penitenciarias en menos de 18 meses, esto no tiene parangón en lo que hace a la República Argentina”.
Por su parte, Lifschitz explicó que la nueva inauguración forma parte de un proyecto integral de seguridad que se asienta en 4 ejes de trabajo: mejorar la eficiacia del sistema policial, tanto de prevención como de investigaciones; dotar a la justicia penal de todas las herramientas necesarios para una labor más eficaz; lograr la inclusión social de los jóvenes en situación de vulnerabilidad social; y por último, mejorar las condiciones de alojamiento de las personas detenidas, sacarlos de las comisarías, con el objetivo de reincersión social de los detenidos.
“La segunda etapa no tiene que ver con infraestructura sino con el trabajo dentro de las unidades penitenciarias, contención, seguimiento, capacitación, para lograr mejores niveles de reincersión social y menores niveles de reincidencia”, señaló el gobernador.
Finalmente Pullaro dijo que se trató de “un compromiso muy fuerte para sacar a los detenidos de las comisarías y trasladarlos a la órbita del ámbito penitenciario”.
“Hoy en Rosario tenemos solamente 25 personas detenidas en comisarías por orden judicial y el objetivo es no tener ninguno”, cerró el ministro de Seguridad provincial.
El traspaso de las detenidas a la nueva cárcel de mujeres se concretará a lo largo de esta semana.
