Autoridades del Congreso, ministros, gobernadores, y dirigentes sociales participaron en el Tedeum que se realizó en la Basílica de Lujan, con la presencia de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en su primera actividad del día para conmemorar el 205 aniversario de la Revolución de Mayo, que culminará esta tarde con una multitudinaria movilización a la Plaza de Mayo y un discurso de la jefa de Estado.

Vestida con tapado celeste y una chalina blanca (representativa de la jornada patria), Cristina llegó cerca de las 11.45 y recorrió las obras de la histórica Basílica junto al arzobispo de la arquidiócesis de Mercedes-Luján, monseñor Agustín Radrizzani, el secretario General de la Presidencia, Eduardo “Wado” de Pedro, y ministros del gobierno.

Acompañaron a Cristina en el oficio religioso celebrado por Radrizzani, el vicepresidente Amado Boudou, el presidente provisional del Senado, Gerardo Zamora, el titular de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, el gobernador Daniel Scioli, y el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.

Asistieron los ministros del Interior, Florencio Randazzo; de Defensa, Agustín Rossi; de Cultura, Teresa Parodi; de Planificación, Julio de Vido; de Economía, Axel Kicillof; de Educación, Alberto Sileoni; de Relaciones Exteriores, Hector Timerman; de Desarrollo Social, Alicia Kirchner; de Seguridad, María Cecilia Rodríguez; los secretarios de Legal y Técnica, Carlos Zannini, de Seguridad, Sergio Berni, y de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, además del titular de la Agencia Federal de Ingeligencia, Oscar Parrilli.

También concurrieron el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, el secretario General de la Campora y diputado Andrés Larroque, el vicegobernador Gabriel Mariotto; los diputados Horacio Pietragalla, Carlos Kunkel, Graciela Gianettassio, y Roberto Feletti, el dirigente Luis D’Elía, el actor Gerardo Romano, y representantes de diferentes cleros religiosos y de organizaciones de Derechos Humanos.

Al concluir el Tedeum, Cristina recibió el saludo, junto al canciller Timerman, de representantes de diferentes delegaciones extranjeras que asistieron a la Basílica de Luján, tras lo cual saludó a la concurrencia en la plaza frente al templo.