La reforma tributaria propuesta ayer por el gobierno provincial tendrá su debate en la Legislatura, luego de que sea enviada a la misma en estos días.

El paquete de medidas, que contempla un alza del 26% en el impuesto inmobiliario y bajas en ingresos brutos para contribuyentes que facturen entre 1 y 4,5 millones de pesos al año es, según el gobernador Miguel Lifschitz, un “socio estratégico en un proyecto común de desarrollo de la provincia”.

En diálogo con Conclusión, el diputado provincial Carlos Del Frade dijo que “le parece bien” la afirmación del gobernador, en cuanto a que la  misma “beneficiará 90 mil pequeños comercios”, aunque estimó que la misma “es muy extraña” debido a que “las entidades que discuten quiénes pagan o no los impuestos son las grandes patronales con una significativa e inexplicable ausencia de organizaciones sociales, desde sindicales a territoriales varias”.

“Los que se favorecen son los medianos y grandes propietarios, tanto urbanos como rurales y al modificarse la alícuota de ingresos brutos en determinados rubros marcados por grandes empresas, se vuelve a favorecer a los que más tienen y no se hace una reforma impositiva progresista en donde aparezcan más fondos derivados de comenzarle a gravar a las rentas extraordinarias que existen en la provincia”, agregó el miembro de la Cámara Baja santafesina.

Seguidamente, Del Frade explicó que el gobierno de la provincia no toma esas medidas “porque se ha resignado a que la política es simplemente administrar los intereses de los factores de poder”.

“Eso está expresado en los tres empréstitos de los bancos internacionales que primero cerraron con la nación y después con algunas provincias y en el blanqueo de capitales que el socialismo votó en forma paralela al macrismo”.

“Ahí queda claro que el socialismo se olvidó de hacer una reforma impositiva por la cual paguen más los que más tienen”, consideró para luego afirmar que “esto es un quiebre filosófico, es la idea de que la política gerencia y no transforma”.

Las otras críticas que deslizó el legislador del bloque Frente Social y Popular son que la medida “se da en el contexto del anuncio de aumentos por encima de la inflación en agua y luz” y que por sus características “parece más una contrarreforma a favor de los intereses concentrados de la economía”.

Esta última manifestación la hizo debido a que “en lugar de cobrarle a los que más tienen, se les reducen obligaciones”.

“Las exportadoras, las rentas extraordinarias, el latifundio, los bienes personales, los grandes laboratorios y los bancos están de fiesta», explicó el legislador rosarino.

Por otra parte, Del Frade expuso que “no se discute el producto bruto geográfico, que es lo que producen los habitantes mayores de 18 años en la provincia, que es casi de 500 mil millones de pesos, mientras que el presupuesto que el gobierno mandó para el año 2017 es de 154 mil millones.

“¿Por qué si se necesita más dinero no se toma de los sectores que más se apropian de la riqueza que producimos los santafesinos para favorecer la vida cotidiana de los santafesinos?”, se preguntó el diputado del FSyP, a la vez que describió que “esa discusión de relación entre presupuesto y producto bruto geográfico nunca se hace en la provincia, por eso nosotros aunque sea, queremos instalar esa idea”.