El candidato a gobernador de Santa Fe por el PRO, Miguel Del Sel, consideró “un acierto” la decisión del senador Carlos Reutemann de sumarse al espacio político de Mauricio Macri porque, dijo, “los demás son todo más de lo mismo.»

“Creo que ha sido un acierto de Mauricio y del Lole de venir a este espacio, que es el que va a provocar un cambio, lo demás son todo más de lo mismo”, sostuvo el ex Midachi.

Del Sel se refirió así al acuerdo electoral alcanzado entre el jefe de Gobierno porteño y el senador nacional santafesino, que fue divulgado por el primero el fin de semana pasado a través de las redes sociales.

Miguel Del Sel se manifestó respecto del acompañamiento del ex gobernador de la provincia, Carlos Reutemann, al PRO y dijo que significa «para el espacio algo muy bueno, formidable. Una decisión de una persona que elije bien, que ve un espacio nuevo, que va a provocar el cambio en la Argentina. Nos da volumen de acompañamiento en la sociedad”.

Además, Del Sel sostuvo que “la gente le tiene respeto como político” a Reutemann “porque administró bien, fue cauto, no emitió moneda cuando el país se caía a pedazos, ordenó la provincia.»

El candidato macrista en Santa Fe le quitó relevancia a un posible acompañamiento del ex corredor de Fórmula 1 a su campaña proselitista local.

“Lo que hizo ya es suficiente, después verá si me acompaña”, dijo en declaraciones a radio LT10 de Santa Fe. “Seguramente -auguró- estaremos al final de la recorrida y, si no, con lo que hizo fue suficiente.»

“Lo de la inundación que algunos le quieren seguir refregando, primero ya pasó”, sostuvo Del Sel en otro tramo de la charla cuando se refirió a las críticas que recibe Reutemann en Santa Fe por su actuación durante la inundación de la ciudad capital, en 2003, cuando era gobernador.

“Yo pienso que más allá de si se cometió algún error, fue un fenómeno natural inesperado, lo que llovió en la cuenca del (río) Salado en esos dos días es lo que llueve en todo el año”, dijo.

La Justicia santafesina aún investiga las responsabilidades de funcionarios públicos por la inundación del 29 de abril de 2003, por la que unas 120.000 personas resultaron afectadas y dejó 23 muertos.