Dirigentes ruralistas criticaron la decisión del Gobierno de reimplantar las retenciones a las exportaciones y se quejaron porque se le saca al campo para «financiar la timba financiera y al FMI».

El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, anunció que aplicarán retenciones a las exportaciones: $4 por dólar a los productos primarios y $3 al resto.

El presidente de Federación Agraria Argentina (FAA), Omar Príncipe reflexionó: «Se condena otra vez a los pequeños y medianos productores, sin diferenciarlos, a pagar más para sostener la timba financiera y al FMI».

«No son buenas noticias. Estamos muy preocupados. Lo primero a decir es que las medidas afectan a muchos sectores, pero desde la Federación Agraria debemos hablar en primer lugar por los pequeños y medianos productores a los que representamos, a lo largo de todo el país», dijo.

Señaló que «se trata de un segmento de la producción que ya venía complicado, con falta de financiamiento, inflación y suba de tarifas, más altísimas tasas de interés».

«Está claro que de acá en más habrá dos dólares distintos. Uno para pagar insumos y otro para vender, con retenciones. En trigo o en maíz, habrá que restar el 10% al valor, con un trigo ya sembrado se cambian las reglas de juego. Hay muchos que se endeudaron para sembrar maíz y se modifica el escenario», alertó.

El presidente del Grupo Los Grobo y referente del sector sojero, Gustavo Grobocopatel, advirtió que «las retenciones son un instrumento negativo» y aseguró que «en un contexto en el que todos vamos a perder mucho, el Gobierno tiene en el campo un empuje». «Hay una debilidad económica y mala praxis en algunos temas», evaluó el empresario, quien señaló: «Esta crisis fue un poco por todo».

Coninagro

Carlos Iannizzotto, titular del Coninagro, consideró que los anuncios del Gobierno «no han sido una buena señal para el campo ni para la economía». El dirigente de la organización que agrupa al sector cooperativo agrario de nuestro país consideró que desde Balcarce 50 «han tenido una mirada fiscalista y la solución es la que hemos visto muchas veces: más impuestos». En ese contexto, Iannizzotto sostuvo que «no hay un mensaje claro de mayor productividad y empleo».

En esa misma línea, Dardo Chiesa, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), señaló que las retenciones «son un mecanismo nefasto» por lo que señaló que «lo vemos con muchísima preocupación». Asimismo, el dirigente rural sostuvo que «hay sectores que la están pasando muy mal como los tamberos, avícolas y porcinos».

Sociedad Rural

En un comunicado, la Sociedad Rural Argentina, que preside Daniel Pelegrina, aseguró que los derechos de exportación «son instrumentos distorsivos que desalientan la producción, la inversión, el empleo y el comercio exterior».

«Creemos que debieran existir herramientas superadoras para lograr la generación de recursos fiscales, que incluyan a todos los sectores económicos. El impulso a la producción es la solución que la Argentina necesita en el contexto de la emergencia cambiaria que arrastramos desde hace meses», sostuvo.

Señaló que «las medidas anunciadas desde el Ministerio de Hacienda apuntan al corto plazo, y se manifiestan como transitorias en la búsqueda del necesario equilibro fiscal». En tal sentido, prometió que «el campo continuará una vez más, colaborando con toda iniciativa que apunte a proyectar a nuestra Nación definitivamente en el sendero del desarrollo».

Carbap

El presidente de Carbap, la Confederación que agrupa a 114 Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa, Matías de Velazco, afirmó que «en principio, con las retenciones no estamos de acuerdo» y se quejó porque «sólo se grava al rubro exportador».

No obstante, indicó que desde el sector ruralista que encabeza entienden «el contexto donde está la Argentina y que la carga se va a repartir entre varios sectores».

«Por ahora, en este sentido no habrá reacciones del campo», indicó el dirigente y aclaró que estarán atentos a que «las provincias y los municipios no apliquen más impuestos al agro». Sostuvo que «en la medida que veamos que el ajuste viene en serio y no es una crisis más, veremos qué hacer».