Tanto en Europa como en Estados Unidos compañías multinacionales y empresas de gran porte comenzaron a aplicar en los últimos meses políticas de ajuste en sus planteles. La amenaza del “brexit”, las disputas comerciales entre Estados Unidos y China y un contexto global cada vez más complejo, se combinaron para justificar las decisiones de recortes adoptados por compañías de los sectores más disímiles.

Sólo en la jornada de ayer se anunciaron planes de reestructuración en Ford, Vodafone, Jaguar Land Rover, BlackRock, H&M y Próximus, que involucrarán al menos 8.100 despidos.

Ford
El fabricante estadounidense de automóviles informó ayer que aplicará un programa para mejorar su competitividad en el mercado de Europa: “La mejora en los costos estructurales se verá apoyada por una reducción de puestos considerados excedentarios en todas las funciones”, destacó el grupo en un comunicado.

“Ford tiene como objetivo reducir los costos laborales tanto como le sea posible, a través de partidas voluntarias en Europa, para lo que trabajará en estrecha colaboración con los interlocutores sociales y otras partes concernidas para lograrlo”, afirma.

La segunda empresa automotriz estadounidense, que desde hace años sufre una pérdida de su cuota de mercado y una rentabilidad insuficiente en Europa, señala que quiere “volver a ser rentable a corto plazo”.

La cuota de mercado de la marca del óvalo azul se ha visto disminuida en los últimos 20 años desde casi el 11% de las ventas en 2000 al 6,4%, el año pasado.

Vodafone
La filial española del grupo británico de telecomunicaciones anunció ayer su intención de suprimir hasta 1.200 empleos, casi una cuarta parte de la plantilla en España, para enfrentar una caída de sus ingresos en un contexto de alta competencia. “El procedimiento de despido colectivo afectará a un máximo de 1.200 personas”, anunció Vodafone en un comunicado. La empresa había contabilizado 5.104 empleados en España en su último informe anual, en marzo de 2018.

El grupo británico de telecomunicaciones registró una pérdida de casi 8.000 millones de euros (unos u$s9.200 millones) en la primera mitad de su año fiscal (hasta septiembre pasado), principalmente por la caída de sus actividades en India.

Jaguar Land Rover
El fabricante británico de automóviles Jaguar Land Rover anunció la supresión de 4.500 empleos, más del 10% de su plantel, ante la caída de ventas debido al desprestigio de los vehículos diésel, una reducción de ventas en China y la incertidumbre del “brexit”.

Esta reducción de efectivos, anunciada en un comunicado de la empresa propiedad del grupo indio Tata Motors, afectará principalmente a Reino Unido y se inscribe en un plan más amplio de reducción de costes de 2.500 millones de libras (3.200 millones de dólares, 2.800 millones de euros) en 18 meses.

JLR perdió 354 millones de libras (450 millones de dólares) entre abril y septiembre de 2018, y ya había recortado alrededor de 1.000 puestos en Gran Bretaña.

BlackRock
El fondo de inversión estadounidense BlackRock confirmó que recortará unos 500 empleos de su plantilla durante las próximas semanas, dentro de un proceso de reorganización, según una nota distribuida ayer entre sus empleados.

Según el comunicado, los despidos repercutirán más en “unas áreas que otras” y afectarán a un 3% del personal, que abarca a más de 14.000 personas, pero “aún así” el número total de empleados sigue siendo superior a hace un año.

El presidente de la firma, Rob Kapito, señala en el documento que este año BlackRock invertirá en iniciativas para impulsar su crecimiento en los próximos años, pese a “mercados volátiles y con vientos de cara en la industria”.

La firma, que prevé realizar más cambios en 2019, ofrecerá la próxima semana sus resultados corporativos para el conjunto del año pasado. En los primeros nueve meses ganó un 27% más a nivel interanual, hasta 3.378 millones de dólares (2.917 millones de euros).

H&M
La cadena de moda sueca H&M anunció el cierre en el primer semestre de este año de seis tiendas en España, para “adaptarse a la situación del mercado”. Y dijo que está dispuesta a recolocar a los trabajadores afectados en otras tiendas.

Fuentes de la compañía citadas por Europa Press estimaron en 145 los trabajadores que se verán afectados por los cierres.

Proximus
El operador de telecomunicaciones belga Proximus, que cotiza en la bolsa de Bruselas, anunció ayer un extenso plan de “transformación” en tres años que prevé la supresión de 1.900 puestos de trabajo.

Este operador, cuyo accionista mayoritario es el Estado belga, explicó en un comunicado que desea “pasar de ser una empresa de telecomunicaciones a ser un proveedor de servicios digitales”.

Para ello, dijo, la compañía tiene previsto contratar durante el mismo período a 1.250 personas especializadas en el sector digital. Dominique Leroy, dirigente de Proximus, justificó la decisión del grupo por las “condiciones de mercado agresivas”.