La Secretaría de Comercio Interior comenzó hoy a inspeccionar supermercados para verificar el cumplimiento de la Ley de Góndolas, que establece parámetros para la exposición de productos a la venta con el objetivo de facilitar el acceso a aquellos más económicos, entre otras medidas, se informó oficialmente.

En esta primera instancia de relevamientos, las inspecciones se centran en la disposición en góndola de productos de las categorías de alimentos, bebidas, higiene personal y artículos del hogar que deben presentar, para cada categoría, al menos cinco proveedores y que ninguno de ellos ocupe más del 30% del espacio.

Además, las micro y pequeñas empresas deben tener garantizado, en conjunto, un 25% del espacio mientras que los productos de cooperativas y mutuales de la economía popular y productores de la agricultura familiar, campesina e indígena deberán gozar un mínimo del 5%.

«Nuestro objetivo es democratizar las góndolas para encontrar más productos, más marcas, y que cada vez haya más pequeñas, medianas y micro empresas de todo el país que puedan acceder a vender sus productos en los supermercados», señaló la secretaria de Comercio Interior, Paula Español, quien participó junto con inspectores de su área en uno de los relevamientos.

Paula Español

«Estamos focalizados en cuidar el bolsillo de las y los argentinos, por eso esta ley promueve empoderar a las y los consumidores que ahora van a contar con mayores herramientas para hacer una compra consciente, visualizando de manera sencilla cuál es el precio más bajo de cada producto», afirmó Español.

En esta etapa se fiscaliza que el producto más barato de cada categoría debe estar ubicado en un espacio equidistante entre el primer y el último estante, y debe contar con una cartelería que indique la leyenda «Menor precio por unidad de medida, según establece la Ley 27.545».

A su vez, la funcionaria señaló que se está trabajando en conjunto con las provincias y las autoridades de los supermercados «para que todas las jurisdicciones cooperen en el control y cumplimiento», ya que «para garantizar la aplicación de la ley es necesario la labor mancomunada».

En este sentido, ya están programadas capacitaciones destinadas a los referentes locales y los cuerpos de inspectores de cada provincia, con el objetivo de que puedan colaborar en hacer cumplir la ley de la mejor manera.

Las planillas de relevamiento se confeccionan en base a la información que las cadenas de supermercados presentaron con carácter de declaración jurada ante Comercio Interior, de modo tal que los inspectores conocen dónde están ubicados los productos de cada categoría, el tamaño que ocupan y las marcas que un mismo proveedor ofrece.

Del total de 510 supermercados minoristas alcanzados por la ley a nivel nacional, que ya deben estar ajustados a la normativa, 189 se ubican en la Provincia de Buenos Aires y 48 en la Ciudad de Buenos Aires.

En caso de incumplimiento de la Ley de Góndolas, los comercios alcanzados están sujetos a la normativa de Lealtad Comercial, reglamentada en el Decreto 274 del 2019 que estipula sanciones que, en la actualidad, pueden llegar a los $550 millones.

La Ley de Góndolas tiene por objetivo garantizar una distribución equitativa de los distintos proveedores en las góndolas para diversificar la oferta de productos y marcas y garantizar el acceso de las micro y pequeñas empresas, así como de cooperativas, mutuales y sectores de la economía popular a supermercados.

Para avanzar en ese sentido el Ministerio de Desarrollo Productivo lanzó la semana pasada el Programa Pymes en Góndolas, que incluye líneas de crédito y asistencia a través de Aportes No Reembolsables por más de $ 3.300 millones a unas 8.000 empresas pequeñas.

Entre los objetivos del programa está el capacitar a cooperativas y mipymes para mejorar su productividad y dar asistencia técnica, tanto en la adaptación al marco normativo de la Ley de Góndolas, así como el facilitar su incorporación al registro de proveedores de los supermercados y lograr la certificación de sus productos y procesos.