La Empresa Provincial de la Energía (EPE) solicitará una suba de la factura, que ascenderá a un promedio de $7.800 mensuales y comenzará a impactar a partir de marzo. El próximo 9 de febrero será la audiencia provincial, mientras tanto esperan definiciones por parte de Nación en cuanto a la quita de subsidios a la energía.
Hugo Marcucci, presidente del directorio, dijo en diálogo con el medio Sol Play: “Lo que nosotros estamos planteando de reacomodamiento de la tarifa para un consumo tipo de 400 kW mensuales sería de $7.800 por mes para los residenciales y para aquellos que son pensionados y jubilados estamos planteando un incremento de $2.000 por mes y se mantiene la tarifa social que va a tener un incremento de $2.000 por mes”.
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“No sabemos cuál es la política nacional porque nosotros tenemos 35% de costos de energía eléctrica y 30% de impuestos”, remarcó.
“Necesitás que las tarifas sean accesibles pero razonables, que les permita tener recursos a la EPE para hacer las inversiones que hay que hacer, por ejemplo, en una estación transformadora”, continúo el directivo de la empresa provincial.
“Tenemos que recomponer una situación de 179 mil millones de pesos de déficit, pero lo haremos con una adecuación progresiva”, cerró.
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Por su parte, la secretaria de Energía de Santa Fe Verónica Geese, días atrás, declaró en el mismo sentido: “La EPE tiene un déficit proyectado de 30 mil millones de pesos a marzo. Que el gobierno anterior no haya actualizado las tarifas, que las haya pisado afectó a todos los santafesinos. Es momento de hacer un diagnóstico sincero de la situación. No haber tomado decisiones fue una medida populista vinculada a cuestiones electorales más que con criterios de eficiencia”.
Nación aprieta a provincias
El Gobierno tuvo que quitar de la Ley Ómnibus el capítulo que refiere al ajuste fiscal, por lo tanto, desde Casa Rosada advirtieron, a través del vocero Manuel Adorni, que habrá un “ajuste mayor” hacia las provincias.
La idea que tiene en estudio la gestión de Milei es que el ajuste a las partidas se concentre en la quita de subsidios a las tarifas, en la reducción presupuestaria en infraestructura y en la baja de planes. Por lo tanto, resta conocer si se eliminarán fondos destinados a la energía, lo que haría encarecer aún más las facturas.
A pesar de la eliminación del paquete fiscal, contemplado en el megaproyecto original, Milei busca mantener la meta de la reducción al máximo del déficit fiscal.
