La Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe) indicó que «luego de 25 meses de caída vuelve a crecer la industria», y que «la mayor actividad de las industrias del sur de la provincia, la recuperación en el sector de la construcción y los programas de financiamiento promocional, propiciaron esa recuperación».
El informe de agosto puntualiza que «entre los sectores de mayor crecimiento interanual se destacan el complejo oleaginoso (1,3%); la industria frigorífica bovina (4,4%); la elaboración de bebidas, la fabricación de aparatos de uso doméstico y línea blanca (7% ); remolques (14%); autopartes de reposición para el mercado interno (6%) y diversas actividades fabriles vinculadas a la construcción».
En esa misma línea, el consumo de gas industrial, deducido el efecto contractivo del sector siderúrgico, finalizó el primer semestre con un alza de 4,7% interanual. Agrega el informe que la importante contribución de estos sectores al producto bruto industrial de Santa Fe permite moderar y revertir en el tercer bimestre los retrocesos anteriormente manifestados.
El informe admite que «más allá de los números positivos de las actividades mencionadas, la industria santafesina continúa enfrentando un escenario externo particularmente desfavorable, en especial por la retracción de la demanda brasileña, y también, entre otros, la marcada caída de los precios internacionales de numerosos bienes integrantes de la oferta exportable de Santa Fe»..
Entre las industrias más afectadas se encuentran aquellas mayormente entrelazadas a la dinámica de los mercados externos.
El comportamiento de las principales variables monetarias de la industria santafesina, precio de los productos y costos de producción, muestra una paulatina desaceleración nominal desde comienzos de 2015.
El procesamiento de soja en el polo industrial oleaginoso en la Provincia de Santa Fe observó en los seis primeros meses de 2015 un alza interanual de 1,3%. La industrialización de semillas acumulada al mes de junio superó las 15,9 millones de toneladas marcando un máximo histórico. La elaboración aceite de soja alcanzó a 3,1 millones de toneladas, observando un incremento de 4,1% con respecto al mismo período de 2014, y superando todos los registros precedentes. En junio la actividad sectorial volvió a mostrar niveles de producción interanual claramente superiores al año anterior.
Este panorama alentador en cuanto a volúmenes producidos se encuentra restringido por la caída de los precios internacionales.
La elaboración de biodiesel con epicentro nacional en el cordón industrial San Lorenzo se encuentra plenamente afectada por la pronunciada caída del precio internacional de petróleo al coartar sus posibilidades de inserción en numerosos mercados internacionales. Las exportaciones de biodiesel con origen en Santa Fe cayeron en el primer semestre el 74% interanual en valor y el 65% en volumen.
Así, en los primeros seis meses de 2015 las colocaciones externas apenas alcanzaron a 134 mil toneladas. La industria provincial retrotrajo en este segmento sus ingresos por exportación en 240 millones de dólares. De igual manera, las exportaciones argentinas de biodiesel acumulan al mes de julio un retroceso de 65% interanual, siendo uno de los sectores exportadores más severamente perjudicados.
La industrialización de materia prima en las principales usinas lácteas radicadas en Santa Fe presentó en la medición acumulada al mes de julio de 2015 un alza interanual de 1,5%, y un global de producción de 1.592 millones de litros de leche. No obstante, en julio los niveles interanuales de actividad cayeron 2% y se estima para agosto una caída interanual de 6%. La industria láctea provincial enfrenta una severa crisis externa caracterizada por la menor demanda de sus productos, la sobreproducción mundial y los derivados menores precios FOB.
La faena en veinticuatro plantas ciclo I localizadas en la Provincia de Santa Fe alcanzó en la medición acumulada al mes de julio de 2015 a 1,17 millones de bovinos, mostrando un incremento interanual de 4,4%.
La producción de acero en Santa Fe, que cayó en los siete primeros meses de 2015 el 11,6% interanual, enfrenta las restricciones surgidas de la recesión brasileña y los efectos perjudiciales de la sobreproducción china.
De acuerdo a información generada por ADIMRA, en la Provincia de Santa Fe la producción metalúrgica creció en el primer semestre del año 2,2% interanual, impulsada principalmente por “Autopartes”, “Otras Maquinarias de Uso General o Especial” y “Otros Productos de Metal”.
La maquinaria agrícola muestra en Santa Fe una amplia retracción que en promedio se ubica en -15% interanual. En equipos de siembra de origen nacional el nivel de actividad continúa ubicándose en el mínimo de los últimos doce años. Entre los meses de abril, mayo y junio se comercializaron en el orden nacional tan solo 307 equipos afectando con intensidad la actividad de numerosas empresas en Santa Fe. En el primer semestre de 2015 sus exportaciones, que totalizaron en nuestra provincia apenas 8 millones de dólares, se contrajeron el 46% interanual.
Luego de quince meses consecutivos de caídas interanuales de la producción industrial, en junio se observó un crecimiento de la producción explicado principalmente por los comportamientos expansivos del sector de minerales no metálicos y automotriz.
La actividad de minerales no metálicos registró un aumento interanual del 17,6%, como consecuencia de la recuperación de la construcción, actividad impulsada por dos factores; en primer término, el crecimiento de las iniciativas vinculadas a la obra pública tanto a nivel nacional como provincial.
En segundo lugar, el Pro.Cre.Ar y su impacto en proyectos residenciales, así como también la persistencia del impulso a la construcción y refacción de viviendas como respuesta a las restricciones cambiarias.
El sector automotriz presentó un aumento de su producción del 6,3% en junio respecto del mismo mes del 2014, siendo el primer mes en el que se registra un crecimiento en la producción de vehículos luego de quince meses. Sin embargo, esto se debió a una baja base de comparación. Aún no se puede establecer un cambio de tendencia en el sector dado que en julio se volvió a observar una caída del 8,3%. Si bien hay una estabilización de la demanda del mercado interno, las exportaciones siguen cayendo por la menor actividad en Brasil.
