Cambiemos, Vicentín, Banco Nación. Hay un hilo que conecta estos tres puntos y que teje una trama densa y compleja de la cual recién en estos días comienzan a revelarse algunos ejes. ¿Cuál es el vínculo entre  la empresa de la familia Padoán -Nardelli y el macrismo? ¿Por qué el 78% de la deuda bancaria de la compañía está concentrado en el Banco Nación con un monto que asciende los $18.370 millones que excede todos los límites de riesgo de concentración fijados en la normativa de Basilea II?

Mientras siguen pasando los meses y la empresa, una de las más grandes agroexportadoras del país, sigue sin presentar un plan de pagos, continúa intentando esconder la compleja situación que atraviesa detrás de la inusual expresión»estrés financiero», salió a la luz que, mientras otras entidades bancarias manejaron los créditos otorgados a Vicentín prudencialmente, (Banco Provincia con unos $1.623 millones y mucho más atrás figuran el Hipotecario ($721 millones), Macro ($540 millones), Nuevo Banco de Entre Ríos ($427 millones) y otros sietes bancos que en su conjunto apenas reúnen una deuda de $1.600 millones), el Banco Nación, bajo la conducción de Javier González Fraga le otorgó sumas extravagantes en forma cuasi irregular, lo que deja en evidencia la cercanía y consecuente favoritismo del entonces gobierno de Cambiemos con la empresa. 

De acuerdo a lo publicado por Fernando Heredia en La Política On Line, para el banco Nación «la deuda de Vicentín significa tal exposición, que compromete el 20% de su responsabilidad patrimonial computable, un porcentaje que limita gravemente su capacidad prestable y pone en jaque sus finanzas».

«Como agravante- detalla Heredia- la institución también financió a gran parte de la cadena de proveedores de la industria, que también se vio afectado por el default de Vicentín. A su vez, el Banco Central todavía no actualizó la clasificación de deudores con la información al 31 de diciembre del 2019, por lo tanto, los pasivos podrían ser aún mayores».

Todos los caminos conducen a Cambiemos

Para rastrear el recorrido que se hizo para que el Banco Nación otorgue los préstamos millonarios, incluso por fuera de lo recomendado a la empresa de Padoán y Nardelli, seguramente habría que remontarse a la cercana relación que ostentaban los dirigentes del anterior gobierno con los empresarios. Los titulares del holding apoyaron abiertamente las candidaturas de Mauricio Macri y aportaron generosamente a la campaña que llevó al empresario a la presidencia de la nación en el 2015. 

Y eso no fue todo. De hecho, el grupo Vicentín fue uno de los principales aportantes a la campaña política que la coalición Juntos por el Cambio emprendió en 2019: entre lo aportado en las Paso (4,5 millones de pesos a través del frigorífico Friar y cifras similares a través de la Oleaginosa San Lorenzo y la Algodonera Avellaneda) y lo puesto en la campaña para la reelección en las generales (3 millones de pesos a través de Friar), la firma se jugó 16,5 millones de pesos a la continuidad del modelo macrista. El mismo que, aparentemente, indujo al grupo a sufrir el tan mentado «estrés financiero». 

Bajo la lupa

Los llamativos montos que Javier González Fraga autorizó a Vicentín son ahora motivo de una investigación encabezada por las actuales autoridades del Nación.

Fraga asumió la presidencia del banco en enero de 2017 en reemplazo de Carlos Melconián. De acuerdo a lo publicado por la agencia Bloomberg, una de las irregularidades más llamativas en esta cadena sería un préstamo de 300 millones de pesos que la institución concedió durante esa gestión que no estaba garantizado. El crédito fue aprobado por la junta pero no pasó por el departamento de préstamos de la entidad.

De acuerdo a las versiones trascendidas y publicadas en La Política On Line, «en el entorno de Eduardo Hecker ya están buscando responsables por esta situación y tienen en mira a la mano derecha del Gerente General Juan José Fragati, un hombre de Fraga que logró permanecer gracias al apoyo de la Comisión Gremial Interna y de los Gerentes Regionales. Se trata del Subgerente General de Banca Corporativa, a quien acusan de haber ignorado las advertencias del Área de Riesgo Crediticio y podrían desplazarlo a la sucursal Madrid, según confirmaron fuentes allegadas a Hecker».

«No hay una explicación económica ni jurídica de por qué se accedió a exceder ese límite fijado por riesgo. Es suspicaz, nadie otorga un crédito por sobre un límite sino recibe una contraprestación», señalaron al medio desde el Banco Nación.

Fuente: Punto Biz, Agencia Bloomber, La Política on Line