Industriales Pymes Argentinos (IPA) calificó hoy de «recaudatoria» la suba autorizada por el Gobierno en aranceles para importar insumos vinculados con la producción, y advirtió que la medida tendrá «efectos devastadores» en las empresas del sector.

La protesta de los empresarios está dirigida a la decisión del Gobierno de aumentar el cobro de la tasa de estadística de 0,5% a 2,5%, que impactará en los artículos importados.

El presidente de IPA, Daniel Rosato, alertó por los efectos «devastadores» en la producción nacional que generará este encarecimiento de los insumos importados que se utilizan para la agregación de valor local.

Rosato aseveró que la disposición tiene un único «fin recaudatorio sin contemplar la crítica situación por la que atraviesa la actividad industrial».

«El Gobierno aplicó la suba a todo tipo de importación, ya sea para la reventa como para los insumos de producción. Inclusive para aquellas importaciones en régimen temporal, en donde se importa el producto, se le agrega valor y se lo exporta, lo que significa un incremento directo del 2% sobre el valor de la materia prima importada para el exportador o para el que vende en el mercado local», afirmó Rosato.

Además, se lamentó que el Ejecutivo haya perdido «la oportunidad de poner en marcha una verdadera inserción inteligente en el mundo, con la aplicación de un decreto que protegiera a los productos finales fabricados en el país de aquellos que llegan importados».

Indicó que la generalización que se aplicó con el decreto 332 «afectó a todos por igual, tanto insumos como a la reventa», y denunció que «sólo busca recaudar».

Desde el IPA reclaman exceptuar a las pymes industriales de las retenciones a las exportaciones, la eliminación de los reintegros, el aumento en la tasa de estadísticas y otras medidas que tomó el Gobierno en materia de comercio exterior.

«Se trata de una medida desafortunada y que además llega en un momento muy desacertado, cuando las Pymes estamos intentando pasar la tormenta que se generó por la combinación de caída del consumo, la falta de competitividad para exportar y con costos financieros que eliminan las posibilidades de recuperar la actividad», sostuvo Rosato.

Destacó que «es necesario que se haga una discriminación de la importación» y puntualizó que «si es un producto terminado debe pagar ese 2% de aumento, pero si se trata de un insumo no puede tener otra recarga».