Coordinadora de Enlace de Entidades Agropecuarias inició este lunes un lockout por cuatro días para reclamar contra la suba en un 3 por ciento de retenciones a la soja

Este lunes comenzó el cese de comercialización de granos y carnes convocado por la Coordinadora de Enlace de Entidades Agropecuarias, medida que se extenderá hasta el jueves a la medianoche. La protesta es la respuesta de las patonales agropecuarias a la decisión oficial de elevar tres puntos los derechos de exportación a la soja y sus derivados. Varias organizaciones de base, fundamentalmente las nucleadas en Confederaciones Rurales Argentinas, combinarán el lockout con protestas a la vera de las rutas, pero prometen que no habrá cortes. El paro es objetado por diversas regionales de Federación Agraria, situación que forzó a la conducción a dejar en libertad de acción a sus afiliados, pese a haber apoyado la medida.

El presidente de la Sociedad Rural de Rosario, Tomás Layus confirmó que la medida incumbe a granos y hacienda en tanto que no hay inconvenientes con frutas y verduras.

 

«La medida termina a las 24 del jueves y por  ahora nadie sabe como se sigue», explicó Layús a los medios. «Eso depende de nuestras basas, por el lado de lo que es Confederaciónes Rurales Argentinas, donde está asociada la Sociedad Rural de Rosario apostamos siempre por el diálogo pero dependemos de las decisiones de CRA».

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«El reclamo puntual es por el aumento de las retenciones de la soja, estaban en 28.7%, después pasó al 30% y ahora al 33%. Esto quiere decir que si uno es productor, de tres camiones de grano de soja, un camión va directamente a estos impuestos, lo que es exagerado y confiscatorio, un segundo camión va a pagar los impuestos provinciales, nacionales y el tercero nos queda para llevar adelante la producción, sembrar, fletes y riesgo productivo», detalló el dirigente rural. Además señaló: «Estamos en contra de cualquier retención que es un impuesto que lo tiene exclusivamente el agro y lo que hace es retraer la producción».

En relación a si la situación que se vive hoy es comparable a la del año 2008, Layus afirmó: «Estamos mucho peor que en el 2008 en cuanto a lo productivo porque los precios internacionales eran el doble de lo que son ahora. Y, en cuanto al punto de vista productivo, estamos complicados por una sequía muy cruenta en febrero y marzo que está haciendo caer los rendimientos. Vamos a producir poco y los impuestos están altos».

En cuanto a si hay riesgos de desabastecimiento, Tomás Layus lo negó de plano. «Es algo de cuatro días y los frigríficos están con mucha carne en cámara. No estamos en contra de la sociedad, lo que queremos es manifestar que estamos disconformes».