Luego de que se diera a conocer la decisión del gobierno nacional de comprar pistolas Taser para las fuerzas federales de seguridad, el concejal rosarino Gabriel Chumpitaz reclamó a las autoridades locales que adopten la misma medida.

Chumpitaz recordó que en su momento impulsó un proyecto de ordenanza que «busca dotar al cuerpo policial de herramientas alternativas para poder disuadir cualquier tipo de acción individual o grupal, que ponga en peligro la integridad de las personas, los bienes públicos, la convivencia y el bien común».

En esa dirección, el presidente de la comisión de Seguridad del Concejo Deliberante rosarino señaló que «actualmente la policía de la provincia de Santa Fe carece de herramientas o armas disuasivas no mortales a distancia, suficientes para poder cumplir efectivamente su labor».

«Tranquilamente los oficiales pueden llevar el arma de electrochoque y el arma de fuego al mismo tiempo, sin ninguna clase de inconvenientes», dijo.

Los cordobeses se suman

Los ecos de la medida también llegaron a dirigentes cordobeses. El legislador provincial cordobés Javier Bee Sellares pidió que el Gobierno del justicialista Juan Schiaretti «adopte» el uso de las pistolas Taser para «disminuir la inseguridad».

«Sería importante que la Provincia de Córdoba adopte la utilización de estas pistolas para disminuir la inseguridad que padecemos a diario los cordobeses», expresó el legislador radical a través de un comunicado enviado a los medios.

«Esta medida le permite al personal policial no tener que usar armas de fuego cada vez que le toque actuar», manifestó Sellares.

Para Bee Sellares, «la utilización de las armas no letales debe darse en lugares de alta concurrencia de gente como áreas peatonales y terminales de ómnibus de Córdoba, entre otros». Además, criticó a «algunos dirigentes» que «creen que es una picana eléctrica».

«No entienden que es un arma no letal para inmovilizar al delincuente. Garantizar la seguridad de los cordobeses debe ser prioridad», agregó.