Por Aldo Battisacco –  Enviado Especial a Buenos Aires.- Gremios docentes marcharon este miércoles a la Plaza de Mayo en conmemoración del Día del Maestro y para reclamar la reapertura de paritarias en el sector, así como también para apoyar el proyecto de emergencia alimentaria que impulsa la oposición en el Congreso.

Los manifestantes comenzaron a concentrarse desde las 10 de la mañana en la intersección de Avenida de Mayo y Perú, a metros de la Casa Rosada.

Bajo el lema «Con hambre no se puede enseñar ni aprender», los sindicatos realizaron una movilización en la que cuestionaron las políticas del Gobierno.

La protesta, que se realizó en el marco del Día del Maestro, estuvo encabezada por la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera) y contó con el apoyo de varias agrupaciones docentes, como Suteba y la Conadu Histórica, además de otros gremios como ATE y la CTA.

Por otra parte, los manifestantes también rechazaron las agresiones que un grupo de educadores sufrió de parte de empleados petroleros cuando realizaban un corte de ruta en la provincia de Chubut.

La Secretaria General de Ctera, Sonia Alesso, dijo a Conclusión que en la jornada de este miércoles se pidió por «fondos para la educación» y por una «ley de emergencia alimentaria».

Además, pidió por una paritaria nacional docente y por la resolución de los conflictos provinciales.

El titular de la CTA, Hugo Yasky, dijo a Conclusión: «Esperamos que mañana en la Legislatura, cuando en el Congreso se plantee la iniciativa de una ley de emergencia alimentaria tengamos la posibilidad de votarla y aprobarla».

«El hambre no admite mañana ni pasado, el hambre tiene que ser resuelto en el acto. Tenemos la posibilidad de duplicar los presupuestos para los comedores y establecer la apertura de los comedores escolares los sábados y domingos», agregó.

«Es ruido en la panza lo que sienten los chicos, es no saber lo que van a comer. El centro de la escuela es el comedor», sostuvo el secretario general de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), Eduardo López.

Y añadió: «Hay hambre, eso lo dice la Iglesia y lo digo yo que soy maestro, que doy clases en un colegio de Villa Soldati. Le sacaron el jamón a los sándwiches, le sacaron las magdalenas a los alumnos.. Nosotros pedimos que pongan plata en la gente y van a ir a comprar comida, no dólares».