Por Marcelo Chibotta

El titular de la Gerencia de Empleo de Rosario, Andrés Danelon, organizó una actividad con motivo de conmemorarse el pasado 12 de junio el día mundial contra el trabajo infantil, «tal como lo hizo el ministro Jorge Triaca al ponerse al frente de la campaña», indicó.

En el cruce de las peatonales Córdoba y San Martín, el gerente de la oficina dependiente del ministerio de Trabajo de la Nación, encabezó durante la mañana de hoy una volanteada junto a otros miembros del área que comanda en las que repartió volantes que rezaban «Juntos podemos terminar con el trabajo infantil».

Consultado por Conclusión, Danelon indicó que «en el marco de la lucha por la erradicación del trabajo infantil como lo hizo el ministro Triaca al ponerse al frente de la campaña hubo mucho interés y apoyo de la gente que nos pide que sigamos».

«Nos pide que sigamos tomando medidas y trabajando tanto en la concientización, no solo de la gente en general sino también en los ámbitos familiares que es de donde se desprenden estas actividades», apreció.

Más adelante, el gerente de la oficina local de Empleo consideró que la situación se da «muchas veces desde la propia ignorancia de muchos que ponen los chicos a trabajar, porque no en todos los casos es una cuestión perversa de mandarlos a trabajar, sino que la lógica del día a día hace que los chicos terminen involucrados en eso en vez de estar en una escuela o jugando, como nos gustaría a nosotros».

Enseguida, aclaró que no tienen registro de la cantidad estimada de niños en esa situación debido a que «hay muy poca estadística, muy pocos números serios y por eso nos vamos guiando por lo pocos elementos que tenemos».

En otro orden, Danelon consideró que desde su asunción hasta hoy «según los registros ofrecidos tanto del ministro de Trabajo de la provincia como de la nación, que son los mismos, nos dan un número cuyo principal impacto está dado en el rubro de la construcción; sobre todo por el parate de la obra pública y privada en la jurisdicción de la Gerencia de Empleo que abarca 120 municipios y comunas de los departamentos del sur de la provincia».

«En la privada se dio porque el mercado se retrajo un poco y entonces los inversores están esperando ver qué pasa, de a poco van perdiendo la desconfianza y empiezan a ver muy lentamente que se empieza a revertir la situación. Y la pública tiene su correlato con la cesación de pagos que hizo la nación en agosto del año pasado a todos los proveedores que cortó la cadena de pagos y por ende la inversión y la obra pública», describió.

— ¿Cómo está el tema de la eGerencia de empleo 2x empresa Juan Navarro, propiedad de Acindar?

— Nosotros estamos trabajando de cerca con la gente de la UOM y vemos el tema con preocupación. De cualquier manera vemos que no es un problema del sector porque sí hay lugares puntuales en los que hay cierta inestabilidad si se quiere, pero también observamos que hay e
mpresas que van reconfigurándose mientras que en otras estamos logrando que inviertan y otras están en una situación de crisis.

— ¿Cuáles son las directivas del ministerio para afrontar la situación?

— El ministro Triaca nos pidió que ampliemos la mirada y no nos quedemos con solamente con la persona que no tiene trabajo. Nosotros cambiamos el concepto para poder cambiar la mirada, consideramos que la persona que no tiene trabajo es alguien que no puede ejercer su oficio y no es un desocupado. Desde esa mirada vamos trabajando en la formación, en la contención y vamos tratando de dotar de nuevas calificaciones para que mejoren su empleabilidad, de cara a los trabajos que se van a abrir y que espero sea en un futuro cercano.

— ¿Con qué instituciones articulan actividades?

— Con todas aquellas que tengan que ver con el mundo del trabajo, con los municipios, con los gremios y con las empresas, porque también desde la oficina de empleo que atiende desde su génesis a las personas que no tienen trabajo, decidimos ampliar la mirada, entonces por eso estamos trabajando muy cerca del empleador y con el empleado también, tanto para contener esa fuente de trabajo como para mejorarle la calificación al trabajador. En este caso, vale decir que lo hacemos codo a codo con el diputado Germán Mastrocola que tiene mucha experiencia y conocimiento del tema.

— Dado el fuerte sesgo comercial que tiene Rosario ¿cómo ve la oficina tal situación?

— En primer lugar podemos decir que en el tema de la librería Bleger, por una cuestión de jurisdicción lo tomó el ministerio de Trabajo de la provincia, pero nosotros estamos acompañando ya que la lucha nuestra es que se recuperen las fuentes de trabajo porque no queremos atender a esos empleados como desempleados. En cuanto al aspecto vinculado a la cuestión comercial en general notamos que tenemos que  hacer un acompañamiento más fuerte porque el aumento de las tarifas ha generado cierta incertidumbre en el sector, pero tampoco vemos que hayan aflojado en brindar sus servicios. Nosotros notamos que se acercan que nos piden programas para participar que los acompañemos en proyectos para sostener el comercio abierto. En este sentido, aprovecho para decir que relanzamos el programa para jóvenes de 18 a 25 años que va a ser también un auxilio. Estamos trabajando mucho con los comercios porque nos van solicitando jóvenes que hagan una especie de pasantía donde el Estado los acompaña para luego lograr insertarlos al mundo del trabajo. Aparte, tenemos en el Congreso la propuesta llamada Mi Primer Empleo, que será superador de los programas existentes.

— ¿Y en la industria?

— Excepto en algunas cuestiones puntuales que nos fue pasando como en la metalurgia o en la línea blanca donde hubo problemas con una empresa, el resto de la industria se está sosteniendo, más allá de que algunas estén más bajas de producción que otras porque saben de la crisis que veníamos y había que pasarla y la estamos pasando todos juntos. Los comerciantes como los industriales decidieron acompañar este proceso. No hay que olvidarse que nos salvamos de que el país explotara en pedazos, todo el mundo está consciente de eso, y si bien algunas medidas son un poco dolorosas o un poco difíciles de tomar, todo el mundo entiende que son cosas que se debían hacer por las situación que se venía transitando.