Empresarios de Brasil llegarán esta semana a la Argentina para reunirse con pares locales con el fin de debatir las relaciones entre ambos países y analizar posibles inversiones.

El grupo de empresarios visitará la Argentina por la convocatoria del Grupo de Líderes Empresariales (Lide), que realizará un seminario el viernes en un hotel porteño, en el marco de una serie de jornadas internacionales entre el 13 y 16 de octubre próximo.

El seminario tendrá exposiciones sobre la nueva imagen de América del Sur y la integración Brasil y Argentina en el contexto del Mercosur.

Al encuentro asistirán brasileños y argentinos, además de autoridades de ambas naciones, así como de otros países latinoamericanos, como el presidente del Grupo Arcor, Luis Pagani y de Omint, Juan Carlos Villa Larroudet.

Del lado brasileño, confirmaron su presencia los gobernadores Geraldo Alckmin (SP) y Marconi Perillo (GO); el diputado federal y presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Pedro Vilela, el economista Marcos Troyjo; el exministro de Desarrollo Luiz Fernando Furlan.

Si bien en un principio había trascendido que la comitiva empresarial, que llegará el jueves, iba a visitar la Argentina con el presidente del país vecino, Michel Temer, con el correr de los días esa versión fue rechazada por el gobierno de Brasil.

El encuentro entre los empresarios de Brasil y la Argentina se dará en medio de un complejo escenario respecto de la relación comercial bilateral.

El déficit comercial del país con el principal socio del Mercosur se disparó 84,5% en los primeros nueve meses del año, hasta los 3.368 millones de dólares, según datos del gobierno de Temer.

El intercambio comercial entre ambas economías retrocedió 7,7% entre enero y septiembre, al ubicarse en los 16.497 millones de dólares, ante un fuerte impacto de la recesión en Brasil, que redujo sus compras a la Argentina 17,7%.

En septiembre se registró un crecimiento del 4,7% respecto del mismo mes del año pasado en el intercambio, al alcanzar los 1.926 millones de dólares, lo que fue observado por empresarios locales como una «incipiente recuperación».