El presidente Mauricio Macri anunció hoy en Davos que dio «instrucciones» a su gabinete para que «en cuanto se pueda se vuelva a cumplir con el artículo 4 del FMI», que estable la colaboración del Gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para evaluar las cuentas públicas, en tanto consideró que para 2016 «la inflación estará mas cerca del 20 por ciento que del 25».

En entrevista con la agencia Télam y otros medios nacionales, el presidente remarcó el fin al incumplimiento del artículo 4 que había decidido el ex presidente Néstor Kirchner (y continuado Cristina Fernández), aunque remarcó que «no está previsto volver a pedir préstamos al Fondo».

«Fue absolutamente en detrimento del país (suspender el artículo 4), no permitirlo fue todo costo para la Argentina. El gobierno anterior fue a cerrar con el Club de París y pagó el doble solamente por no cumplir con el artículo 4. Con lo que se pagó extra, se podrían haber construido todos los jardines de infantes que hacen falta en el país», opinó.

El jefe de Estado dijo que esto se enmarca en el intento de «recuperar el valor de la palabra» y que el gobierno se compromete «a decir la verdad en todos los casos», incluido con el FMI, porque «mentir no sirve de nada».

«Esto no significa que no vayas a desarrollar el país en la forma que quieras, nosotros tenemos total libertad con respecto al Fondo. Lo único que hace el artículo 4 es informar en base a los datos que se les provee», agregó.

En ese momento, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, se sumó a la conversación y recordó que «como dice el ministro de Hacienda (Alfonso Prat Gay), el informe sobre la Argentina se hace igual, la diferencia es si el Gobierno colabora o no».

Con respecto a la cumbre de Davos y la percepción sobre la Argentina, Macri se mostró exultante: «Hemos sido casi la única buena noticia con lo que está pasando en los mercados. Pero lo importante, como siempre, es que esto se transforme en hechos concretos en beneficio de los argentinos».

«Es en nuestro beneficio estar acá, queremos que inviertan en la Argentina, que intercambien tecnología, que desarrollen talento local y que ese talento se quede en el país. Que sepan que Argentina quiere volver a ocupar un lugar en el mundo. Nuestra actitud generará más confianza en los propios empresarios argentinos, que han venido huérfanos a Davos en los últimos diez años», remarcó.

Consultado por el tema precios y paritarias, el presidente dijo que su gobierno cree que «la inflación para 2016 estará más cerca del 20 por ciento que del 25», y con respecto a los reclamos salariales de los gremios, dijo que se sentarán «a hablar con los trabajadores» y espera «colaboración».

En ese sentido, señaló que «en esta transición estamos ordenando el desbarajuste heredado» y que generalmente estas situaciones «terminan en crisis económica, y ahora no es así», y llamó a esperar «asentarse» y que haya «colaboración de (Hugo) Moyano y los gremios», y reiteró que «la meta es llevar la inflación a un dígito».

Además, celebró la decisión de la Secretaría del Tesoro estadounidense, que ayer comunicó que dejará de vetar en forma automática las solicitudes de créditos de la Argentina en organismos multilaterales, y expresó que es importante «porque Argentina enfrenta un cuello de botella en el tema infraestructura», y agregó que esa iniciativa de Washington «no llevó nada a cambio, buscan nuestra cooperación en temas como cambio climático, lucha contra el narcotráfico, etc».

Sobre el vínculo con China, Macri señaló: «Vamos a seguir profundizando la relación con China, pero queremos que entienda el gobierno que además de comprarle lo que el gobierno anterior les aceptaba comprar, nosotros también queremos que nos compren trabajo argentino y no sólo soja», además de recordar que se «revisarán todos los convenios» firmados.