El presidente Mauricio Macri advirtió este viernes que 2019 «es un año bisagra» para el país, en el que «se define si tenemos 25 años de crecimiento o nos sumimos en la oscuridad y la confrontación», al inaugurar un oleoducto para el yacimiento de Vaca Muerta, en Añelo, Neuquén.

«Vaca Muerta genera trabajo en todo el país», expresó al encabezar la inauguración del oleoducto Loma Campana-Lago Pellegrini, que permitirá triplicar la capacidad de transporte de crudo no convencional desde ese yacimiento hasta el sistema troncal de distribución.

Más adelante, el primer mandatario insistió sobre el llamado al diálogo, que hasta el momento había sido solo una declamción, a fuerzas de la oposción al manifestar que «es momento de tener generosidad, sentarse alrededor de una mesa y acordar» y que son políticas básicas para «llevar tranquilidad y futuro a la casa de todos los argentinos».

En tono de justificación, Macri señaló que «había que corregir» políticas del anterior gobierno, a la vez que enfatizó que las políticas en materia energética «no hubiesen sido posibles si seguíamos en default, con cepo».

«Hay que recordar dónde estábamos hace tres años y medio», y advirtió: «Recibimos un país que importaba energía, después de haber sido gran exportador de energía», al tiempo que se «habían quintuplicado los cortes de luz», indicó.