El presidente Mauricio Macri viajará el próximo martes hacia Estados Unidos para mantener su primera reunión bilateral con su par norteamericano, Donald Trump, luego del frío inicial en la relación entre ambos por el apoyo del gobierno argentino a su su rival electoral, la demócrata Hillary Clinton.

Con la intención de obtener el compromiso de profundizar el vínculo y el comercio bilateral, o al menos ratificar los avances logrados durante la gestión de Barack Obama, Macri emprenderá su vuelo hacia Estados Unidos para cumplir la primera visita oficial de un presidente argentino a Estados Unidos en 14 años (el último fue Néstor Kirchner en julio de 2003, cuando se reunió con George Bush).

Luego de la renuncia de Martín Lousteau a su cargo de embajador, Macri estará acompañado en tierras norteamericanas por el encargado de negocios de la representación diplomática argentina, Sergio Pérez Gunella, además de una importante delegación de funcionarios nacionales.

Como primera actividad en su breve gira estadounidense, el jefe de Estado encabezará en Houston un almuerzo con empresarios petroleros que ya están radicados en la Argentina o
pretenden iniciar sus actividades en el país, precisaron fuentes oficiales.

El encuentro, que se llevará a cabo en The Houstonian Hotel, fue organizado por el Instituto Argentino del Petróleo y el Gas (IAPG) y contará con la participación del ministro de Energía y
Minería, Juan José Aranguren; y del secretario general del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa, Guillermo Pereyra, que también preside la Comisión de
Minería, Energía y Combustibles del Senado.

En ese marco, el mandatario resaltará el acuerdo multisectoriales para impulsar la explotación de gas no convencional en el yacimiento Vaca Muerta, para así atraer a los CEOs de aquellas firmas que evalúan operar en la Argentina.

El jueves, en tanto, Macri tendrá el tan ansiado almuerzo de trabajo con el magnate inmobiliario en la Casa Blanca en el que estará en agenda el análisis de la crisis política y social en Venezuela, entre otros temas de la agenda bilateral y mundial.

Coincidiendo en sus duras críticas al presidente Nicolás Maduro, está previsto que ambos mandatarios aprovechen la ocasión para condenar de manera tajante los hechos de violencia que se registraron la última semana y reclamen la inmediata convocatoria a elecciones.

De hecho, Macri se convirtió en el principal jefe de Estado latinoamericano de oposición al régimen chavista que encabeza Maduro, tal como se lo reconoció días atrás el líder de la oposición venezolana, Henrique Capriles.

Por otro lado, tal como había anticipado el Gobierno en un comunicado, ambos jefes de Estado buscarán el jueves «profundizar la cercana sociedad» entre la Argentina y Estados Unidos y así «avanzar en un diálogo sobre distintos temas de mutuo interés y hacer un repaso de todos los asuntos que conforman la agenda bilateral».

Tras la sorpresa mundial generada por el triunfo del magnate el pasado 8 de noviembre, el primer contacto entre ambos, previo a la asunción de Trump al frente de la Casa Blanca, se
había producido casi una semana después mediante un llamado  telefónico de 15 minutos de duración.

Más tarde, el 15 de febrero de este año volvieron a dialogar por teléfono, esta vez ya como pares, y en esa conversación el norteamericano le reiteró la invitación para que mantuvieran
una reunión bilateral en Washington.

En esos diálogos, el magnate había destacado el «liderazgo» que Macri «juega en la región», al tiempo que había subrayado que durante su gestión la Argentina y Estados Unidos tendrán
«la más cercana relación de la Historia».

En su paso por Washington, el Presidente también tendrá tiempo para reunirse con legisladores en el Capitolio y para visitar la Cámara de Comercio de Estados Unidos, concluyeron
integrantes de la Casa Rosada a Noticias Argentinas.