Por Aldo Battisacco desde Buenos Aires 

La «violencia» no fue exclusividad de una movilización del jueves 14 frente al Congreso. Habrá que recorrer la crónica diaria para establecer si existieron antecedentes que precedieron a los acontecimientos de los que fuimos testigos el día que se intentó llegar al quorun necesario, para aprobar  la denominada ley de reforma provisional.

Al debate que vimos y escuchamos en distintos medios de comunicación, se le sumó el tratamiento que le dio al tema un plenario de comisiones en Diputados, en el que se registraron empujones, gritos, y la virulencia discursiva de los legisladores que de distintas bancadas aportaron lo propio para dirimir razones, algunas de ellas con más apego a la realidad que otras. La reunión contó con las presencias de los ministros de Trabajo, Jorge Triaca, y de Hacienda, Nicolás Dujovne,

Ese martes, el acceso al anexo de la Cámara baja hubo empujones entre los empleados de seguridad y quienes pretendían acceder a presenciar la reunión, entre ellos, un grupo de sindicalistas y manifestantes de la tercera edad.

Poco más tarde, el titular del bloque del Frente para La Victoria, Augustín Rossi, logró separar y apaciguar  a los grupos en conflicto, a los gritos y trepado a una mesa.

En el marco del funcionamiento de las comisiones, el presidente del bloque de diputados nacionales del Pro, Nicolás Massot,respondió el martes pasado a los representantes del Frente para la Victoria que «si quieren pedir por la guita, vamos a buscarla a -los penales de- Ezeiza o Marcos Paz», y remarcó que desde Cambiemos están arreglando «lo que otros no tienen los huevos para arreglar».

Indignado por la alusión de los diputados del Frente para la Victoria-PJ a «la plata que pierden los jubilados», el titular de la bancada macrista expresó: «Ahora nos van a escuchar a nosotros, quieren pedir por la guita, vamos juntos a Ezeiza y Marcos Paz. Soy el primero en ir con ustedes».

https://www.youtube.com/watch?v=Q2dWWZoCMRA

El diputado por Córdoba se refirió así a los ex funcionarios que por diversas causas penales, muchas de ellas ligadas a corrupción, están detenidos en esas dos cárceles.

La respuesta

El guante fue rápidamente tomado por el diputado del Frente para la Victoria, Rodolfo Tailhade, quien le recordó al legislador cordobés las vinculaciones de su familia con militares juzgados por hechos de desaparición, tortura y muerte durante el denominado «Proceso de Reorganización Nacional», y que están cumpliendo condena en el penal de Marcos Paz.

https://www.youtube.com/watch?v=MkQoOdHHfoA

El revanchismo es un muy mal precedente

Por su lado, Leopoldo Moreau, salió al cruce de las expresiones de Massot y le enrrostró al legislador del PRO por Córdoba, que se «están tomando revancha política, porque estuvieron incómodos cuando se juzgaba a los genocidas». Además, cargó contra el secretario del juez Bonadio, Enrique Rodriguez Varela, «hijo de un ministro de la dictadura, que como colaborador de este juez que es un payaso y que debería estar preso por prevaricato, se toma la revancha». Y prosiguió, diciendo «es el quien le tomo la declaración a Zanini, que fue traído en marzo y fue torturado». «Macri inauguró el ciclo histórico de la perdida de derechos». Y continuó diciendo que «esta ley es parte de ese ciclo histótico». «Dejarán una Argentina arruinada», sentenció Leopoldo Moreau.

https://www.youtube.com/watch?v=Ixse_xqOpYw

El debate en comisiones por la reforma evidenció claras posturas de las bancadas y sus profundas diferencias ideológicas e históricas. E indudablemente esto constituyó la antesala de los sucesos que se vivieron enla sesión especial convocada por el oficialismo para el jueves pasado, a tan solo dos días de haber obtenido el dictamen que reglamantariamente debía tratarse el miércoles 20.