El presidente del interbloque Juntos por el Cambio en la Cámara de Diputados, Mario Negri, consideró este sábado que el modo en que se aprobó la Reforma Judicial en el Senado «es vergonzoso, no tiene antecedentes» y constituyó «una bofetada a las instituciones y a la sociedad argentina”.

“No tuvieron ningún pudor con el mamarracho de las modificaciones que introdujeron a último momento, con la creación de más de mil cargos. Metieron 400 cargos en 15 minutos con una birome. Y lo hicieron en forma virtual, prácticamente con la cara de los senadores detrás de una pantalla, y si es posible que hablaran no más de un minuto», agregó el cordobés en declaraciones radiales.

«La Argentina no puede estar sometida a este nivel de tensión al que nos están llevando. En esta Reforma Judicial no hay nada que resuelva los problemas de la gente, de las familias, de divorcios, de herencias, o de violencia de género», expresó.

Al referirse al tratamiento que el proyecto tendrá en la Cámara baja, remarcó: “Se equivocan todos los que crean que en Diputados eso se puede enmendar».

«No hay parche que pueda resolver el desastre y el bochorno institucional al que nos sometió el Senado. Achicamos el debate si solamente sumamos o restamos números de bancas. Es un tema de fondo lo que se está jugando en la Argentina, está sitiado el poder judicial, quieren echar al Procurador», opinó.

Se equivocan todos los que crean que en Diputados eso se puede enmendar

El ex candidato a gobernador por Córdoba advirtió que el oficialismo puede «comerse el caramelo algún legislador de que les va a regalar una Cámara federal o un juzgado en algún lado».

«Las modificaciones que puedan hacerse no significan un servicio a la Justicia. Cuando eso vuelva al Senado con mayoría simple se puede ratificar el proyecto original. Eso no o sería ingenuidad, eso sería complicidad. No se puede canjear convicción y principio por un pedazo de ruta o por un puente”, sentenció.

Con respecto a la sesión convocada en Diputados para el martes, Negri insistió que su bancada querrá «garantías de que los temas que se puedan eventualmente considerar sean acordados y vinculados a demandas urgentes de la sociedad».

«Hemos ayudado siempre al Gobierno, le hemos facilitado el tratamiento de más de 15 leyes. De los 257 diputados, hay 210 que miran por las pantallas y que sólo pueden hablar dos minutos. No se pueden discutir temas conflictivos y de la envergadura de la reforma aprobada en el Senado con esa modalidad, sería una locura”, puntualizó.