Por Marcelo Chibotta

Corrían los mates y las facturas en el patio de una casa de la «República de la Sexta», a pocas cuadras de la ciudad universitaria bautizada como La Siberia. En el lugar funciona una cooperativa textil de vecinos que recibieron la visita del senador nacional Omar Perotti y charlaron de todo.

Después de más de dos horas de diálogo entre los presentes, Perotti accedió a ser entrevistado por Conclusión cuando la noche comenzaba su reinado. Así, sentados en un tapial de ladrillos levantado en la vereda de la vivienda, el senador aclaró que todo lo correspondiente al pago de los fondos buitre «es una discusión con mucho más impacto en medios nacionales, porque cuando uno recorre la provincia nota que se discute el aumento de precios, de la energía y la preocupación de algunos sectores por el empleo».

Enseguida y volviendo al cauce de la pregunta sobre su decisión de aprobar en la comisión de Presupuesto del Senado el pago a los fondos buitre propuesto por el gobierno nacional, el ex candidato a gobernador por Santa Fe aclaró: «Sin dudas digo que ello es un arreglo y no un acuerdo porque lo que se estará haciendo es pagar una sentencia».

«Hay opiniones divididas y creo que en primer lugar el Congreso debe recuperar plenamente las facultades que le da la Constitución Nacional para entender y arreglar la deuda externa y cortar todas estas delegaciones que hemos tenido hacia el Ejecutivo que en este caso permite que estén negociando la deuda para pasar a discutir de aquí en más que se hace con el financiamiento de la Argentina», explicó.

Más adelante, Perotti agregó que «cerrar esta etapa es algo que se planteó largamente, el mismo gobierno de Cristina tuvo intentos para cerrar esta etapa y lamentablemente no se pudo. Soy de los que cree que con el tamaño esfuerzo que se hicieron en los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner para limpiar el frente financiero externo argentino, deberíamos haberlo terminado».

«Esto es salir de aquella situación en la cual los bonistas del mundo no creían en la Argentina y conseguir el 93 % de ingreso de bonistas, cancelar la deuda con el Fondo Monetario Internacional, con el Club de París, con el Ciadi, la deuda con Repsol, fueron señales claras de de que el único paso que nos quedaba era este juicio con este juez que la verdad no creo que haya un argentino que considere que su decisión fue justa. Argentina fue castigada inmerecidamente por esa sentencia que luego la misma Cámara de Apelaciones y la misma Corte de Estados unidos le dieron sentencia firme y quedó como cosa juzgada. No fue tan sencillo discutir con alguien que está sentado sobre una sentencia favorable», abundó.

Enseguida el rafaelino indicó: «No pagar, no cerrar este capítulo ¿es bueno para la Argentina? creo que no, porque la Argentina sigue fuera de las posibilidades de un endeudamiento a tasas más económicas y de la asistencia plena que podría tener de organismos como el Banco Mundial, la Corporación Andina de Fomento o el Banco Interamericano. Lo que hemos recibido de acuerdo a lo que le correspondería a la Argentina de estos bancos, es muy poco, y la Argentina necesita tener posibilidades para seguir desarrollándose».

«Por eso uno cree que hay que terminar esa etapa tomando el Congreso todas las atribuciones que da la Constitución para el manejo de la deuda, cerrar esa etapa nefasta que en parte no tuvo al Congreso en el origen y en la autorización de las deudas porque gran parte de ellas se generaron durante la dictadura, y tener un rol activo para fundamentalmente no repetir viejos errores».

¿Y pagar qué garantiza?Perotti interior 1

Pagar cierra una deuda que crece en el orden de los 1.500 millones anuales, no es una deuda que quede allí y no crezca, eso no nos permitirá ser beneficiarios de financiamiento internacional a tasas mucho más bajas que las que tenemos hoy. Quiero ser claro en esto, no es la panacea arreglar y se equivoca el gobierno si cree que a esto lo tiene que mostrar como un gran éxito. Creo que es algo que había que terminar para clausurar una etapa de la deuda. Lo que no puede hacernos creer gobierno argentino, es que de la noche a la mañana por haber hecho esta instancia van a llover las inversiones en la Argentina o van a estar todos prestándonos muy barato, eso no es así. La Argentina tendrá que terminar esta etapa, deberá seguir generándose la confianza necesaria en el mundo para volver a generar esos vínculos para acceder a las mejores instancias de financiamiento como tienen Uruguay, Paraguay, Bolivia o Chile, como países cercanos. Me parece que esta es una etapa que hay que ponerla en su lugar sin que ello signifique que allí están las soluciones a un montón de dificultades coyunturales que vive la Argentina.

¿Y entonces que le permitirá al país hacer el arreglo?

Creo que el arreglo nos permite resguardar al 93 % que entró en el canje porque hoy el no pago no nos permite pagarles en tiempo y forma a esos bonistas a quienes ya hace más de un año y nueve meses que no están cobrando, y si se nos cae esa reestructuración de deuda, allí está el mayor daño para la Argentina porque allí está el esfuerzo de todos estos años, los de ir resolviendo ese frente externo que significó mucho trabajo de argentinos porque se pudo pagar con reservas, con recursos propios y eso es central a cuidar porque nos parece que cualquier situación que genere una aceleración de la deuda nos complicaría.


¿Qué consideraciones, en líneas generales, hace de las medidas que hasta aquí tomó el gobierno nacional?

Lamentablemente lo que uno ve es que hay algunas medidas que se tomaron, no guardaron una gradualidad que uno sentía debía encarar esta etapa y así lo planteábamos quienes trabajamos junto a Daniel Scioli. En esto también quiero ser claro, también Scioli planteaba un acuerdo para cerrar esta etapa del frente externo. Su equipo económico lo decía ya en aquel momento y lo sostuvo incluso durante los días en los que muchos de ellos estuvieron en la comisión de Presupuesto de la Cámara de Senadores. Se planteaba alguna gradualidad e ir eliminando aquellos subsidios en los sectores que no eran necesarios, como así también una gradualidad tanto para la energía como para el gas. No se planteaba una devaluación tan fuerte ni tampoco la quita de retenciones al sector petrolero o sojero. Sí había coincidencias en las economías regionales y en el trigo. No son datos menores estas diferencias, porque con el seguimiento y cuidado de los precios, sin una devaluación fuerte, con una quita de subsidios graduales, no estaríamos viviendo lo que tenemos hoy que es una suba de precios indiscriminada, donde se ha perdido la referencia de precios entre los distintos locales por los mismos productos, donde se ha generado un fuerte incremento en la tarifa de la energía y no resguardando no solamente lo domiciliario sino también a los sectores productivos. Creo que esto ha generado la suba indiscriminada de precios, impulsada por las mismas tarifas en las que le tenemos que sumar lo que el gobierno provincial hizo de su parte que fue también incrementar las tarifas y los impuestos.

¿Y cómo ve el impacto de estas medidas hacia el interior de la población?

Me parece que es demasiado para la espalda del consumidor, de los santafesinos y de los argentinos en general sobrellevar así de golpe un sacudón tan fuerte en las subas de precio y en las tarifas que han quitado mucho poder adquisitivo. Eso debilita nuestro mercado interno y precisamente eso era lo que quería hacer el gobierno anterior, es decir, mantener la fortaleza del mercado interno ¿por qué?, porque este gobierno se encuentra con algo que ya se veía y que es un mundo que lo que quiere hacer es vendernos y un Brasil que lamentablemente está en uno de sus peores momentos económicos y es nuestro principal socio comercial y no nos está comprando. Entonces, frente a un mundo que no compra sino que quiere vender y frente a un socio comercial con dificultades que le impiden comprarnos, lo único que nos queda por manejar y cuidar es el mercado interno porque es el que va a sostener los niveles de actividad. Entonces allí tenemos diferencias en esta apreciación y uno decía que el gobierno reaccione  y reaccione en este resguardo, y seguramente hay cosas que no están dentro de su mirada ideológica pero la necesidad de cuidar ese mercado interno frente al contexto internacional que les queda, nos parece central

Usted acompaño en la gestión anterior la visita de Berni y el arribo de Gendarmería a la ciudad. ¿Qué puede decirnos sobre la situación del delito por estos días?Perotti interior 3

Vamos a esta coyuntura, sobre si la Gendarmería vuelve o no vuelve o si está o no está. A nosotros nos tocó intervenir durante el gobierno anterior para que la Gendarmería vuelva a Rosario, que era lo que nos pedían los vecinos y siento que todavía por un tiempo importante es necesaria la presencia de las fuerzas federales porque la conformación y estructuración de nuestra policía va a llevar tiempo para su capacitación y equipamiento, como en la jerarquización de sus funciones y en el compromiso que sienten con los santafesinos. La fuerza se tiene que recuperar para que podamos tener confianza en quien tiene que cuidarnos. Me parece que es allí donde más acento hay que ponerle a la conducción, y la conducción de la policía tiene que ser central y tiene que restablecerse la jerarquía porque hay que tener muy en claro quién manda. La desvirtuación que se dio en la creación de distintas fuerzas policiales llevó a que aquellas instancias de las unidades regionales que coincidían con cada departamento, en donde se sabía que había un jefe, se fueran perdiendo. Y cuando nadie sabe quién manda, es lo mejor que puede pasarle al delito, porque saben cómo penetrar en los huecos y en cada una de las divisiones que la fuerza tiene. Ojalá Nación y Provincia entiendan que tiene que haber presencia de las fuerzas federales, por la magnitud del delito en la provincia de Santa Fe y por la necesidad de reestructuración en la policía.

¿Cómo ve al peronismo a nivel nacional de cara a las elecciones que se vienen en el caso que haya más de una lista?

Sin dudas con un grado deliberativo fuerte. Se ha perdido una elección con lo que eso significa y con la necesidad, a mi entender, de discutir y analizar los motivos, las causas y en qué cosas hay que cambiar y mejorar para que la sociedad nos visualice como una alternativa válida para acompañarnos y para conducir la Argentina. Es necesario discutir eso y no clausurar ninguna otra discusión para saber en qué cosas no hay que volver a equivocarse o qué cosas no hay que repetir. Nunca ha sido rápida y menos aún instantánea, la recuperación del peronismo después de una derrota. Ojalá los debates enriquezcan a nuestros cuadros y militantes y podamos en el menor tiempo posible tener la propuesta que nos dé la posibilidad de seguir defendiendo derechos y de resguardar logros. Creo que esta es una de las demandas que seguramente la sociedad y los más humildes tienen para con el peronismo.

¿Y el peronismo santafesino?

Hay que hacer los esfuerzos para que aquellos dirigentes que tienen un vínculo cotidiano con la población santafesina, sean los que puedan ir expresando la conducción del partido. Creo que una fuerte presencia territorial como la tienen los intendentes, senadores, presidentes comunales y diputados no puede quedar afuera de ello. Y también es importante el rol de los gremios que tienen un rol fuerte y que no solo tienen que estar velando por los intereses de los afiliados en la instancia sectorial, sino por trascender con un aporte al resto de la sociedad. Así sumados, nos darían la posibilidad de generar una alternativa que contemple y resguarde las mejores expectativas en base a lo realizado durante las elecciones por el peronismo de la provincia.

¿El 2019 lo contará con las mismas ganas, el mismo espíritu y la misma decisión de ser candidato a gobernador de la provincia de Santa Fe como en 2015?

Lo que uno siente hoy es el deseo de acompañar un proceso de reestructuración de nuestra fuerza política nacional, hay que trabajar para ser los mejores porque eso tenemos que ser. Me van a encontrar sumando en la formación de nuestros cuadros políticos y en la de nuestros dirigentes para que ese proyecto pueda ser superador y llegue al gobierno.