El presidente de la Nación, Mauricio Macri, puso en marcha ayer, simbólicamente, las obras para el soterramiento del tren Sarmiento, obra que en una primera etapa abarcará el trayecto entre Haedo y Caballito.

Por decreto, el Gobierno les asignó 45 mil millones de pesos a las obras, que hace una década fueron adjudicadas a un consorcio compuesto por la argentina Iecsa, Comsa (España), Ghella (Italia) y Odebrecht, de Brasil.

Desde 2007, Ghella es socia de Angelo Calcaterra en la conformación del Grupo ODS (Obras, Desarrollos y Servicios), en el que quedaron integradas las dos firmas líderes del sector que Calcaterra, primo del actual presidente, había adquirido el año anterior: Iecsa y CreUrban.

Una investigación que será publicada en las próximas horas, asegura que todo el grupo empresario pasó este año a manos de Calcaterra, quien no habría perdido el vínculo con el grupo Macri y que, por lo tanto, podría estar beneficiándose de decisiones que toma el Poder Ejecutivo apurando la realización de obras en las que participa.

Los 45 mil millones de pesos asignados a la obra, por decreto 767 de este año, representan el mayor desembolso hasta ahora decidido por el gobierno nacional para una sola obra pública.

 

*Por Raúl Dellatorre