El Papa Francisco celebró hoy la Santa Misa en la Basílica de San Pedro, en El Vaticano, y llamó a «hacer espacio» a la palabra de Dios en la vida diaria, mientras que pidió «no dejar empolvar la Biblia como si fuera un libro más».

«Dios no está lejos, el que habita los cielos descendió a la tierra, se hizo hombre. Eliminó las barreras, canceló las distancias. No lo merecíamos. Él vino a nosotros, vino a nuestro encuentro», manifestó el Sumo Pontífice.

Y añadió: «Cambia tu vida porque ha comenzado una nueva forma de vivir: ha terminado el tiempo de vivir para ti mismo; ha comenzado el tiempo de vivir con Dios y para Dios, con los demás y para los demás, con amor y por amor».

El Papa sostuvo que «en medio de tantas palabras diarias» es necesario «escuchar esa palabra que no nos habla de cosas, sino de vida».

«Leamos algún versículo de la Biblia cada día. Comencemos por el Evangelio; mantengámoslo abierto en casa, en la mesita de noche, llevémoslo en nuestro bolsillo, veámoslo en la pantalla del teléfono, dejemos que nos inspire diariamente», manifestó Francisco.

Además, señaló: «Descubriremos que Dios está cerca de nosotros, que ilumina nuestra oscuridad, que nos guía con amor a lo largo de nuestra vida».

Se trató de la primera celebración del Domingo de la Palabra de Dios, que busca aumentar el contacto de los católicos con la Biblia.

«Esta fiesta quiere reavivar la responsabilidad de los creyentes: que conozcan mejor la Sagrada Escritura y la mantengan viva con una transmisión y comprensión permanentes, que den sentido a la vida de la Iglesia en todas las situaciones», indicó El Vaticano al anunciar la festividad.