Faltan apenas unos días para la aplicación del descanso dominical -próximo 3 de julio-y aumenta el estado de tensión en la ciudad. Tal es así, que hoy las cinco sucursales de la cadena internacional de supermercados Carrefour cerraron sus puertas, y sin dar explicaciones, impidieron el ingreso de los trabajadores.

Ante la sorpresa, los empleados y el cuerpo de delegados comenzaron a realizar asambleas en los distintos establecimientos, frente a lo cual los responsables de esa cadena de comercios, de capitales franceses, decidieron no atender al público.

1f7469f6966b4df7a9d1062bb32f107b_1Desde el Sindicato Empleados de Comercio indicaron mediante un comunicado que el hecho de impedir la entrada a los trabajadores “es una artera y miserable maniobra para presionar a la Justicia y tratar de doblegarla a partir de distintas presentaciones que hicieron con referencia a la Ley 13.441, de Descanso Dominical”.

“No deja de asombrarnos cómo estos empresarios, que desde Buenos Aires traen camiones cargados con mercadería con destino a las sucursales en Rosario y luego en camiones de caudales se llevan sus ganancias al exterior, se aprovechen de los empleados para ‘usarlos’ ante la inminente puesta en vigencia de la citada ley en la ciudad de Rosario”, agregaron desde el gremio.

Además, desde el Sindicato recordaron que la situación se repite en otras grandes cadenas de la ciudad. En Coto, por ejemplo, despidieron al menos 20 trabajadores aduciendo “falta y disminución de trabajo no imputable a la empresa”.