Así lo aseguró Guillermo Parodi, secretario adjunto de UTE, quien manifestó su rechazo a las pasantías laborales en empresas privadas que el Gobierno porteño impuso a estudiantes de escuelas secundarias públicas y las consideró "trabajo flexibilizado".
La profesora Isabel Oliveira denunció ante la Policía Civil que un guardia de seguridad la había perseguido durante más de 30 minutos, mientras hacía compras en un supermercado en la ciudad de Curitiba.
Este debate se instaló fuertemente a partir de este martes, cuando el cuerpo de delegados de la Asociación Empleados de Comercio de Rosario, llevó adelante una protesta en la puerta de un Carrefour de la zona céntrica, donde reclamaron por la utilización de cuatro cajas automáticas o "cajas robots" que reemplazarían el trabajo humano.
La firma de supermercados decidió cerrar las puertas de sucursales de Capital Federal y Balcarce. Los trabajadores se enteraron en el mismo día.
En las inspecciones, se solicitó a los choferes de los camiones y al jefe de la planta de distribución que exhibieran el tráiler para chequear que la entrega coincida con el pedido realizado.
El hipermercado estaba abierto este jueves cuando irrumpió un gerente de la multinacional francesa para ordenar el desalojo, tras lo cual le informó al personal la drástica decisión. Desde el municipio buscan reinsertar a los trabajadores despedidos.
La convocatoria impulsada para la pequeña y median emprsa abarca a fabricantes de alimentos, artículos textiles, de bazar, almacén y electro.
“Aumentaron considerablemente los aislamientos y naturalmente esto también afecta al plantel de nuestras sucursales, de nuestros proveedores y de los servicios de distribución”, afirmó Pablo Lorenzo, presidente de Carrefour Argentina.
Bajo la consigna “el hambre no espera”, entregaron un petitorio a las autoridades de la cadena de supermercados para que “atiendan nuestro reclamo, que básicamente es tener un plato de comida en nuestras mesas para las Fiestas”.
Orlando Canido, el dueño de Manaos, está que trina. Denuncia que la cadena de supermercados no quiere pagarle los $300 que cuesta un pack de seis gaseosas cola de 2,25 litros, asegura que sólo le ofrece $230. Carrefour hace semanas que dejó de vender la gaseosa de La Matanza.
La supervisora Adriana Alves Dutra aparece en las imágenes del hecho cuando uno de los vigiladores sostiene a Joao Silveira Freitas mientras el otro lo golpea durante cuatro minutos hasta matarlo.
El empleado denunció que cuando pidió licencia para cuidar a sus hijos, desde Carrefour no sólo se negaron sino que expresaron: "¿Cómo vas a pedir vos la licencia para cuidar a los pibes? Para eso está tu señora". Sin embrago, la Justicia falló a favor de la familia.