Durante todo el año pasado, el acumulado anual de consumo de energía eléctrica tuvo una caída del 0,5% en el promedio nacional. Y en Buenos Aires, fue del 3%.

Aunque las temperaturas de diciembre de 2017 fueron inferiores a las del 2016, en el último mes del año hubo un asenso del consumo eléctrico de 1,2%. De hecho, el 30 de diciembre se marcó un record de consumo para un sábado.

El año del consumo eléctrico fue desparejo. Según datos de Fundelec, hubo seis meses de suba (enero, marzo, agosto, octubre, novimbre y diciembre) y otros tantos de baja (febrero, abril, mayo, junio, julio y septiembre).

También hubo un comportamiento diferente según las regiones. Pareciera que los lugares más alejados de Buenos Aires fueron más demandantes. Son lugares donde el atraso tarifario era menor al de Buenos Aires, donde las tarifas era una quinta a séptima parte del promedio del interior.

En la región centro, de Córdoba y San Luis, hubo una caída del 2% Mientras que en San Juan y Mendoza hubo una suba de 2,4%. Un dos por ciento subió Santa Fe y Entre Ríos.