El Índice de Precios al Consumidor que difunden legisladores de la oposición registró en abril último una suba del 6,7%, el más alto desde el 2002, y una inflación interanual del 41,7%.
El indicador, denominado «Índice congreso», duplica la variación de marzo último, y la variación de abril que hoy dio a conocer la dirección de Estadísticas de San Luis del 3,4%.
El informe de los legisladores de la oposición, dado a conocer a través de un comunicado detalla que en los primeros cuatro meses la inflación acumuló 19,4%, más del doble que en enero-abril de 2015, cuando llegó al 8%.
El comunicado de los legisladores explica que los ajustes tarifarios «explicaron más de dos tercios de la inflación del mes, determinando en gran medida la magnitud de la variación mensual».
«Sin embargo, en abril se observó también que las alzas en alimentos y bebidas se mantuvieron por encima del 2% (aumentan al 35% interanual), al tiempo que también se registraron subas en educación y atención médica», añade la declaración.
Con estas cifras la denominada la inflación núcleo (o IPC Core) se mantuvo en niveles superiores al 2% mensual.
Según los legisladores el dato de abril, registra que es el avance inflacionario más alto, para los primeros cuatro meses del año desde el 2007.
El comunicado agrega que en términos interanuales, la inflación alcanzó 41,7% acelerándose 6,2 puntos porcentuales en relación a marzo y 13,6 puntos porcentuales en lo que va del año.
El dato se dio a conocer luego de que hoy el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay brindó una conferencia de prensa junto al Jefe de Gabinete, Marcos Peña, en el que insistieron que para el segundo semestre va a bajar la inflación.
Miguel Bein estimó la inflación anual en 37,4%
El economista Miguel Bein estimó hoy que la inflación de este año llegará al 37,4 por ciento, mientras consideró que «una lluvia de dólares puede suavizar la transición entre agendas hacia el necesario cambio de régimen de la política y la macroeconomía».
En su estudio, el asesor económico de Daniel Scioli durante la campaña presidencial, pronosticó un déficit del 4,8%, mientras vaticinó una caída en el Producto Bruto de 1,9%.
Al analizar que la inflación a fin de año se ubicará alrededor del 37,4%, puntualizó que es posible que se registre un freno en la inflación en el segundo semestre si no se concretan «nuevos aumentos tarifarios».
«Con un dólar ayudando a anclar los precios de los bienes, la dinámica inflacionaria a partir de junio debería moderarse significativamente», indicó en el sondeo.
«Una lluvia de dólares puede suavizar la transición entre agendas hacia el necesario cambio de régimen de la política y la macroeconomía», subrayó Bein.
Insistió en la posibilidad «de apalancar la economía con crédito en general e ingreso de capitales» ya que «en particular permite limitar los costos del ajuste de precios relativos, en un contexto donde el Gobierno usa a discreción la caja para manejar la Gobernabilidad».
El especialista destacó que esa alternativa puede ser útil en medio de un contexto con «bajísima deuda de la Nación, provincias y empresas y una coyuntura global caracterizada por tasas que siguen siendo bajas».
«Que la nueva bonanza resultante no extravíe la agenda y nos transporte de regreso al mundo del populismo insostenible, y a la ´felicidad´ del atraso cambiario destructivo», sostuvo.
Evaluó, además: «Para una economía que recién se abre a los mercados luego de 6 años de desendeudamiento compulsivo, la brecha fiscal apenas le importa a un puñado de economistas que definen el ajuste actual de precios relativos con manejo de la caja para amortiguar los costos políticos, como un ´ajuste gradual´ dado su bajo impacto fiscal».
