De acuerdo con los especialistas del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta), el cultivo de maíz volvería a ganar terreno y con 40 millones de toneladas previstas, la cosecha superaría su récord histórico.

Además ofrecería un muy buen margen bruto de ganancias para la próxima campaña 2016-2017, expresó un informe del Inta que destacó que la baja de las retenciones y los permisos de exportación impulsaron un crecimiento del 30% del área a sembrar.

«Producto de las nuevas políticas para el mercado agropecuario ligadas a la quita de retenciones y los permisos de exportación, cultivos como el maíz resultaron beneficiados», indicaron los especialistas.

Así, de acuerdo con las estimaciones del Inta, la cosecha alcanzaría su récord histórico con 40 millones de toneladas y un aumento del 30% del área sembrada.

En este sentido, Juan Pablo Ioele –técnico del Inta Corral de Bustos, Córdoba– aseguró que «se espera una buena campaña 2016-2017 para el maíz, un cultivo que gana terreno y ofrece un muy buen margen bruto, en especial, en campo propio».

«Si las cuentas continúan tal como lo estiman los especialistas, nos vamos encontrar con una cosecha histórica y récord a escala país de 40 millones de toneladas de maíz y un incremento del área sembrada del 30%», confirmó.

Con estas cifras, el técnico se refirió a la posibilidad de que la Argentina ocupe el segundo lugar en el mundo como exportador de maíz y que deje de lado a Brasil.

Es que, de acuerdo con Ioele, «se está trabajando muy bien el cultivo».

A su vez, se refirió al incremento de los rendimientos: «En la anterior campaña, el maíz pasó de un promedio de 76,7 quintales por hectárea a 78,6 (7860 kilos), apoyado por rendimientos provinciales muy importantes que superaron su techo, como los casos de La Pampa, Chaco y Santiago del Estero (con 20, 10 y 5 quintales por hectárea, por encima del promedio, respectivamente)».

Por otra parte, el investigador detalló: «Al hecho de que se lo dejó de tratar como un cultivo caro, se le suman los paquetes tecnológicos que diseñamos, lo que permitió encontrarle la vuelta para que nuevos ambientes se incorporen a su siembra».

«Asimismo, hay buena humedad en el suelo y una demanda interna creciente, debido al incremento constante en el consumo de las cadenas porcinas y avícolas del país«, señaló.

En contrapartida, subrayó la necesidad de ser prudentes: «El mundo producirá unas 55 millones de toneladas más de maíz que la campaña pasada y, aún, no sabemos cómo esta gran oferta repercutirá en el precio fijado por los mercados internacionales, donde ya estamos sintiendo sus repercusiones en nuestro precio pizarra».

De acuerdo con las estimaciones mundiales, Estados Unidos aumentó su superficie de siembra en un 6 %, es decir podrá obtener unas 20 millones de toneladas más de maíz.

A estas cifras se le agregan las 15 millones más producidas por Rusia y países cercanos, las 10 millones de toneladas generadas por Brasil y otras 10 más de la Argentina.

En este contexto, Ioele expresó que «si bien la construcción del precio internacional no se arma solamente en base a la oferta y a la demanda, cuando tenemos un repunte tan grande de la oferta puede suceder que el precio experimente alguna problemática en el futuro«.

En consecuencia, el agente del Inta recomendó que los productores de maíz argentinos «se preocupen por trabajar comercialmente y empiecen a cerrar los negocios».