En el marco de un almuerzo organizado por el Consejo de las Américas, que lo galardonó con el premio Gold Insigne, Mauricio Macri fue entrevistado por el periodista estadounidense Charlie Rose. Consultado sobre la relación con el país gobernado por Donald Trump, el jefe de Estado afirmó que el vínculo «es muy bueno».

«Hasta ahora no hemos logrado muchos avances, pero estamos trabajando», reconoció el líder del PRO, que enumeró que están «tratando de exportar limones, ya para el próximo ciclo», así como también pretenden «resolver el tema de la carne y del biodiesel y otras cuestiones varias».

De todos modos Macri sostuvo que «hay una actitud muy buena de parte de las autoridades del Gobierno para lograr un intercambio de relaciones mas profundas entre los países». El Presidente agregó que la Argentina y Estados Unidos están «trabajando muy bien en algo que es tan importante como el comercio, que es combatir el narcotrafico, que para el Gobierno es una prioridad».

«Por primera vez en años hemos lanzado un operativo junto con la DEA. Eso nos pone muy contentos porque luchar contra el narcotráfico también tiene aristas que tienen que ver con el terrorismo y el crimen organizado. Ha sido muy importante restablecer las relaciones con Estados Unidos en estos temas», remarcó.

Por otra parte, el mandatario nacional llamó a «dinamizar el Mercosur» y unirlo a la Alianza del Pacífico «lo antes posible», a la vez que se refirió a que un posible acuerdo comercial con la Unión Europea «representa una gran oportunidad» para el bloque regional.

«Después del Brexit, necesitan fomentar nuevas relaciones y lograr nuevas opciones para su comercio, por eso este intercambio debería ser mutuamente ventajoso», analizó. Al referirse a la política doméstica, el Presidente manifestó: «Debemos demostrar que podemos deshacernos del populismo, que es lo que estamos haciendo».

«En la mayoría de los ciudadanos se instaló la certeza de que ser un país potencialmente rico no alcanza y que uno tiene que desarrollar los recursos y para eso hay que tener estado de derecho, reglas claras, y poner fin a las estafas, a la corrupción y al proteccionismo. Las resistencias al cambio todavía perduran en un grupo de ciudadanos y dirigentes que pretenden convencer al resto de la Argentina para que vuelvan los años del kirchnerismo, pero hoy expresan solamente a una minoría, quizás un 20, un 25 por ciento de la Argentina», sentenció.