Por Santiago Fraga

Este jueves no tendrá lugar la tradicional sesión del Concejo Municipal rosarino, en consecuencia del paro por una reapertura de paritarias de parte de la Federación Santafesina de Trabajadores Municipales (Festram), tras no acatar la conciliación obligatoria dictada por el gobierno de la Provincia de Santa Fe.

A raíz de esto, Conclusión consultó a algunos ediles, que en general se solidarizaron con los trabajadores del Concejo, que pertenecen al sindicato, y calificaron de «correcto» el paro.

Alejandro Rosselló, presidente del bloque PRO, sostuvo que los concejales son «respetuosos» de la situación y que «hay que tratar de solucionarlo lo más rápido posible».

«Es su lucha por lo que creen justo, nosotros respetamos esa decisión y la situación de paro. Es un conflicto que hay que tratar de solucionar lo más rápido posible porque perjudica a la ciudad desestimar el justo reclamo de los trabajadores», aseguró a este medio.

En la misma sintonía, Eduardo Toniolli, presidente del bloque Justicialista, consideró «correcto que no se sesione», y aseguró que pese a ello no se verá afectado el normal transcurso de las actividades en el Concejo.

«El Concejo tiene un elevado nivel y volumen de trabajo semanal. Esta semana funcionaron las comisiones igual, aún cuando no iba a haber sesión», dijo el edil, y agregó: «Frente a una situación muy particular, que es un paro municipal de dos días en pleno ejercicio de un derecho constitucional como es una huelga, frente a una situación económica muy difícil y el pedido de reapertura de paritarias, me parece que forzar el funcionamiento miércoles y jueves estaría mal».

Finalmente, el concejal Jorge Boasso, presidente del bloque Radical, fue más reticente con el hecho de que se haya tenido que llegar a la situación de paro, asegurando que no le parece «una herramienta para utilizar en la primera de cambio», y «menos cuando hay una conciliación obligatoria establecida por ley».

«Yo soy siempre proclive de que los conflictos en pujas salariales se resuelvan consensuadamente, con el diálogo. No me gusta que paren la ciudad dos días cuando hay una conciliación obligatoria, que es una ley y obliga a las partes a sentarse a negociar», manifestó a Conclusión, para luego agregar: «Por lo tanto el paro, si bien es un derecho constitucional, no me parece una herramienta que hay que utilizar en la primera de cambio y menos aún cuando una conciliación obligatoria establecida por ley ha sido dictada».

De igual manera, ante la reunión del próximo jueves, sostuvo que podría haberse hecho ayer y así se hubiera evitado el paro. «Son los hechos absurdos de este querido país», manifestó.

Sobre el panorama a raíz del paro, donde se ven las peatonales copadas por puestos y vendedores ambulantes, aseguró que más allá de ese caos «en días sin paro el control es prácticamente inexistente».

«Cuando no hay paro el caos se ve en el tránsito o en la falta de control en general. Esa es la única diferencia. Hoy ves que la peatonal es un quilombo, y otro día la peatonal no es un quilombo pero lo es la ciudad», concluyó Boasso.

Sobre la sesión de la semana que viene, reglamentariamente tiene que ser doble, por lo que los temas que trataron esta semana las comisiones quedarán para la primera sesión del jueves que viene. En caso de una continuidad del conflicto gremial, tendrán que definir si utilizan otros días para sesionar.