Como cada paro de municipales, las calles de las peatonales rosarinas se cubrieron de mantas, aquellas que utilizan los vendedores ambulantes para exponer sus productos. Es que debido al paro de municipales, no hay agentes en la ciudad para controlar la venta no autorizada en la vía pública, por lo tanto, los vendedores ambulantes aprovechan la ausencia de control municipal para realizar su trabajo.

En la peatonal rosarina se puede conseguir indumentaria, bijouterie, películas, perfumes, y diferentes productos. Conclusión habló con los vendedores para conocer los elementos que ofrecen y sus precios y con los compradores, quienes se mostraron conformes con los costos de los locales callejeros.