El emblemático músico Roger Waters sería despedido de la discográfica BMG –con la que tenía contrato desde 2016– por haber cuestionado el accionar de Israel y condenado sus ataques hacia el pueblo Palestino. Si bien la desvinculación aún no se hizo oficial, trascendió que la decisión de la empresa estaba tomada desde el año pasado.
Las declaraciones del ex bajista de Pink Floyd le trajeron complicaciones en su gira por Latinoamérica: no sólo algunos hoteles se negaron a alojarlo, sino que la Justicia Federal de Argentina le prohibió hacer declaraciones al respecto durante los dos recitales que dio en el estadio Monumental.
Tras el ataque del grupo terrorista palestino Hamás, el cual desencadenó el conflicto en la Franja de Gaza, Roger Waters puso en duda los hechos y deslizó que podría haber sido una puesta en escena. “Es muy sospechoso que no hayan escuchado ruido de las explosiones. Israel exageró la magnitud de los ocurrido al inventar historias sobre la decapitación de bebés”, manifestó.
En su cuenta de Instagram, Waters profundizó: “Allí están los oprimidos, los palestinos, y el opresor, el gobierno israelí. El opresor ha estado asesinando a los oprimidos durante setenta y cinco años”.
En su gira por Argentina, el músico británico profundizó su rechazo a Israel en una entrevista con Página/12: “Lo más fácil es señalarme como antisemita, y es porque no tienen un compás moral, no pueden tener un argumento sólido desde el lado israelí de la cuestión. Están cometiendo asesinato, están cometiendo genocidio, están oprimiendo a otro pueblo”.
