El ejército de Afganistán informó este domingo que aumentó el número de fallecidos por el proyectil lanzado por Estados Unidos el pasado jueves sobre una base del Estado Islámico (EI).
Entre los fallecidos se encontrarían al menos cuatro altos dirigentes de la sección afgana de Estado Islámico en Korasán, según el portavoz de la Gobernación de Nangarhar, quien confirmó la completa destrucción de la zona del impacto.
El país norteamericano lanzó el proyectil contra un bastión del grupo yihadista del Estado Islámico. Es la primera vez que esta bomba desarrollada a partir de la guerra en Irak es utilizada en combate.
Así lo aseguraron autoridades afganas luego de que el proyectil no nuclear más potente del arsenal estadounidense atacara el este de ese país. Además, destruyó una importante instalación del Estado Islámico.
El mandatario estadounidense se refirió al potente proyectil lanzado este jueves en las cavernas, que tenía como objetivo destruir puntos estratégicos del Estado Islámico.
Por orden de Donald Trump, el país del norte arrojó una GBU-43 hacia cuevas del grupo terrorista. El armamento pesa unos 10.000 kilogramos y es conocido como "la madre de todas las bombas".
En la lista de países patrocinadores del terrorismo que confecciona el Departamento de Estado también han estado en el pasado Cuba, Irak, Libia o Afganistán, informó la agencia de noticias EFE.
Este miércoles un comando de insurgentes islamistas disfrazados de médicos atacaron el establecimiento en Afganistán. Las fuerzas especiales afganas necesitaron seis horas para poner fin a la pesadilla.
Un coche bomba explotó sobre las 14.30 (las 7 de Argentina) contra un vehículo del Ejército afgano en las inmediaciones de la sede del Banco de Kabul en Lashkargah, capital de Helmand, indicó el portavoz del gobernador provincial, Omer Zawak.
El Comité Internacional lo anunció este miércoles tras sufrir la peor tragedia en 20 años en ese país con la muerte de seis de sus miembros y la desaparición de otros dos en un ataque contra uno de sus convoyes.
El atacante detonó un explosivo en el estacionamiento del máximo tribunal del país y detonó un explosivo. Hay más de 40 heridos. Hasta el momento, ninguna organización terrorista se adjudicó el atentado.
El año pasado fue el más cruento para la población afgana con 11.418 víctimas de la guerra (3.498 muertos y 7.920 heridos), lo que significó un 3 por ciento más que en 2015.