El movimiento chiita libanés atacó con “varios drones” las instalaciones del Ejército israelí en respuesta a la muerte del alto jefe de Hamas, Saleh Al Aruri, el 2 de enero y de Wisan Tawil de Hezbollah, ultimado el lunes en otro ataque.
Al menos 129 combatientes de esa organización y más de 20 civiles, entre ellos tres periodistas, murieron en ataques de similares características desde el 7 de octubre. El líder de Hezbollah, jeque Hassan Nasrallah, prometió combatir "sin límites" si Israel declara la guerra al Líbano.
Una nube de polvo se elevó de los restos de los graneros a la hora en que confluían frente a ellos tres columnas de manifestantes que reclamaban por las víctimas de la tragedia. La policía evacuó la zona
La nación árabe de Medio Oriente se encuentra sumida en una grave crisis política y económica que llevó al Banco Mundial a afirmar en junio que la situación del Líbano es una de las peores registradas a nivel mundial desde mediados del siglo XIX, con una caída drástica de cerca del 40% del PBI per cápita desde 2018.
El Sumo Pontífice lo aseguró durante una audiencia privada en el Vticano con el primer ministro designado libanés, Saad Hariri. Tras más de ocho meses de bloqueo los partidos aún disputan el reparto de ministerios.
Muchos acontecimientos importantes acaecieron, desde el asesinato del líder militar iraní Qasem Soleimani ("héroe del mundo multipolar") por un bombardeo estadounidense hasta las reñidas y tensas elecciones estadounidenses, con un final polémico. La pandemia, lejos de cambiar el rumbo del mundo, parecer haberlo acelerado.
El descendiente de libaneses ex presidente de la Came y empresario, Elias Soso, expresó su visión sobre la situación en la capital del Líbano, luego de la explosión que ocurrió en un puerto días anteriores. Un imperdible análisis sobre el contexto histórico de una región atravesada por la guerra, pero con una increíble capacidad de recuperación. Además, la cura para todo mal.
La medida había sido decretada por el ahora ex primer ministro Hassan Diab y debía ser ratificada por el Poder Legislativo. Mientras tanto, las protestas en la calle se hicieron sentir al denunciar a las autoridades por la responsabilidad que les cupo al respecto de las explosiones en el puerto de Beirut.
El 4 de agosto, dos explosiones de gran magnitud devastaron el puerto de Beirut y muchos distritos de la capital, dejando al menos 220 muertos y 7.000 heridos.
El líder del Gobierno, que formó su gabinete en enero pasado tras la renuncia en octubre de Saad Hariri por la presión de una ola de protestas antigubernamentales, dijo que enviaría la propuesta el lunes al Consejo de ministros.
Miles de personas han salido a las calles de la capital libanesa para exigir el castigo a los responsables de las explosiones en el puerto este martes.
"Después de la enorme catástrofe de Beirut, anuncio mi renuncia al Gobierno", dijo la ministra de Información, Manal Abdel Samad, al tiempo que pidió disculpas a los libaneses por no poder "colmar sus aspiraciones".