La organización sindical vela por la continuidad laboral de unos 160 empleados de la compañía, debido a que no cuenta con información cierta al respecto de las decisiones que tomará la empresa checa que se prevé se convertirá en la nueva dueña del centro de compras.
Este debate se instaló fuertemente a partir de este martes, cuando el cuerpo de delegados de la Asociación Empleados de Comercio de Rosario, llevó adelante una protesta en la puerta de un Carrefour de la zona céntrica, donde reclamaron por la utilización de cuatro cajas automáticas o "cajas robots" que reemplazarían el trabajo humano.
Referentes sindicales del gremio de trabajadores químicos decidieron avanzar con una protesta en la puerta de la empresa holandesa de capital inglés Shynton. El paro se llevó adelante entre las 6 y las 22 de este miércoles, por tiempo indeterminado.
El violento episodio ocurrió en el barrio porteño de Villa Lugano, cuando un grupo de delegados del Sindicato de Empleados de Comercio de la Ciudad de Buenos Aires se hizo presente en el supermercado para constatar las precarizaciones laborales padecidas por los trabajadores.
Desde el cuerpo de delegados de Carrefour Rosario, la preocupación es urgente debido a que la implementación de esta tecnología, en un lapso corto de tiempo, se encamina a dejar "un ejercito de desocupados".
Empleados de esa cadena de comidas rápidas se afiliaron al Sindicato de Trabajadores Pasteleros y -luego de tres décadas de la filial estadounidense en Argentina- lograron la representación.
La oferta aceptada fija un incremento total de un 40 por ciento al mes de julio próximo, a abonarse en 3 tramos, un 20 por ciento en marzo, 6 en mayo y 14 en julio.
La oferta del Gobierno provincial consiste en un aumento salarial del 102 por ciento promedio para 2022. La oferta incluyó el funcionamiento de Mesas Técnicas para analizar las recategorizaciones y nuevas bonificaciones, entre otros temas.
Los manifestantes protestaron “contra la expulsión de delegados sindicales y por el cobro del bono de fin de año". El conflicto con la empresa GPS “viene desde hace meses, en una lucha contra los ataques de la patronal”.
Los trabajadores del sector percibirán un 20 por ciento de incremento durante el primer trimestre del año. Si la inflación supera lo arreglado, se reabre la discusión.
La medida de fuerza incluyó la apertura de molinetes en la estación Constitución, desde las 13 y hasta las 14.
Bajo la consigna "20 de Junio la vigencia de Belgrano" la expresidenta se hará ver por primera vez con los trabajadores de la Central que conduce Hugo Yasky en Avellaneda.