El sumo pontífice dijo este jueves en una audiencia con feligreses: "Por favor, no escondan esta realidad, nosotros somos religiosos, sacerdotes para llevar a la gente hacia Jesús, no para 'comer' a la gente con nuestra concupiscencia".
Se trata de Maria Lia Zervino, quien lidera la secretaría general de la Unión Mundial de las Organizaciones Femeninas Católicas.
El sumo pontífice explicó que "una cosa es manifestar el dolor por los efectos de esa acción y otra es decir 'Usted es un sinvergüenza porque está haciendo esto y esto'". En otro sentido, dijo que "por el momento no se vislumbra" una visita suya a Argentina.
El sumo pontífice dijo que el asunto “es la cuestión crucial que desafía a los hombres, a los países, a las sociedades”.
El sumo pontífice se hará presente en las ciudades de Edmonton, Quebec e Iqualuit para pedirles perdón por los abusos sufridos en internados llevados adelante por instituciones cristianas desde fines del siglo XIX hasta la década de 1980.
El sumo pontífice adelantó además que en el futuro designará a dos mujeres en la comisión que se encarga de la elección de obispos de todo el mundo.
El sumo pontífice definirá en el verano europeo los nombres de su nuevo "gabinete" para la Curia y este martes recordó al fallecido cardenal Cláudio Hummes, quien le recomendó no olvidarse de los pobres al momento de ser nombrado Papa.
Bergoglio eligió su nombre papal después que su par brasileño le dijera entre aplausos, y con un abrazo en el momento de ser nombrado como sumo pontífice, que no se olvide de los pobres. Tuvo una larga enfermedad.
Según contó el pontífice, quiere viajar a Rusia para ver si el presidente de ese país, Vladimir Putin, "abre una ventana" que le permita "ayudar a la paz".
El sumo pontífice abordó diferentes temas como la realidad de Latinoamérica, detalló los cuatro pecados de la comunicación y describió cuáles son los cuatro principios sobre los cuales asienta su papado. También recomendó leer a un filósofo argentino marginado por el “progresismo civilizatorio”.
El sumo pontífice lamentó que haya “víctimas que llorar y demasiada sangre, la muerte de tantos inocentes, los traumas de familias, de ciudades, de todo un pueblo”.
El sumo pontífice también condenó el “ataque bárbaro” a un centro comercial de la ciudad ucraniana de Kremenchuk. Pidió "que el Señor abra las vías de dialogo, que los hombres no quieren o no pueden encontrar.