El Kremlin también advirtió este lunes que ningún país es inmune al terrorismo cuando se le preguntó si había habido un fallo importante por parte de los servicios de seguridad a la hora de impedir el mortal ataque del viernes.
El sistema de alerta terrorista del país centroeuropeo tiene tres niveles, y el más alto se activa tras un atentado en el propio país o en el extranjero o cuando se considera inminente la amenaza de uno.
En un mensaje, el prelado de la Madre de Dios en la capital rusa habla del "brutal atentado terrorista" que, hasta el momento, ha dejado más de 250 víctimas entre muertos y heridos. El llamamiento a ser testigos de la esperanza "en estos tiempos oscuros".
El ataque se produce tras una serie de amenazas y supone una represalia de la organización yihadista ante la participación de Rusia en los conflictos de Siria y del Sahel africano.
Un grupo fuertemente armado irrumpió en la sala de conciertos del shopping crocus, y abrió fuego indiscriminadamente. El gobierno de Putin lo calificó de “sangriento atentado terrorista”.
"Llevamos luchando por ello 730 días de nuestra vida. Y ganaremos", dijo el mandatario, flanqueado de cuatro dirigentes occidentales, en un acto al aire libre en el aeropuerto de Gostomel, cerca de Kiev.
El presidente Zelenski, exigió una investigación internacional luego de que funcionarios rusos afirmaran que el avión fue derribado por el Ejército ucraniano con dos misiles justo cuando se dirigía a cumplir con un canje de prisioneros de guerra, aunque sin mostrar pruebas.
El primer ministro ucraniano, Denys Chmygal, prometió que su país "hará pagar a Rusia el sufrimiento y el dolor que ha causado". Kiev está pidiendo urgentemente a sus aliados occidentales más medios de defensa antiaérea para hacer frente a las tropas de Moscú.
A pesar del frío, Nadezhdin logró recoger miles de firmas desde el sábado para respaldar su postulación, con largas filas frente a la sede de su comando de campaña.
En Rusia, el Gobierno del presidente Vladimir Putin condenó el ataque ucraniano contra Donetsk y anunció la captura de una localidad en la provincia oriental y fronteriza de Jarkov, en medio de creciente presión militar rusa en el frente de combates.
Los objetivos de la arremetida rusa y la magnitud de las agresiones no estaban claros de inmediato. Moscú no hizo comentarios al respecto. Hubo varias personas heridas.
Según el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional estadounidense, John Kirby, la información recopilada indica que el país asiático proporcionó recientemente sistemas de lanzamiento y varios misiles balísticos al Kremlin.