El Movimiento Barrios de Pie-Libres del Sur y el Polo Obrero se movilizarán para acompañar a los familiares de los militantes sociales Darío Santillán y Maximiliano Kosteki, asesinados por la Policía Bonaerense en el año 2002 tras una protesta, en lo que se conoció como la Masacre de Avellaneda.
La tradicional protesta que se realiza cada año frente a la Bolsa de Comercio, convocada por organizaciones políticas y sociales repudia el remate como un símbolo de "un modelo extractivista que privilegia la concentración de la tierra en pocas manos y no produce comida, produce comodities para exportar".
Los reclamos durante el acampe en la 9 de Julio en CABA, provocó la reacción del jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta junto a otros dirigentes políticos que parecen estar más preocupados "en sacarnos de la calle que en resolver la pobreza", dijo la Coordinadora de Barrios de Pie.
Una de las referentes de la movilización perteneciente al Partido Obrero, Melisa Molina, le dijo a Conclusión que quienes criminalizan la protesta social son “quienes tendrían que generar trabajo para que las familias puedan comer en su hogar”.
Los repartidores se congregaron frente a Gobernación y mantuvieron un encuentro con el subsecretario de Investigación Criminal, Andrés Rolandelli, en el que acordaron avanzar con algunas estrategias que mejore las condiciones de inseguridad.
Se concentraron en barrio Las Flores por la situación económica que se vive en el país, y exigieron mercadería al supermercado Libertad.
Un grupo de manifestantes pidió la renuncia del director del del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales. Hubo algunos enfrentamientos con la Policía.
La protesta se mantiene frente al Ministerio de Desarrollo Social y se extenderá hasta este viernes en reclamo de mayor asistencia alimentaria a comedores comunitarios y creación de puestos de trabajo.
“El gobierno no da una respuesta efectiva a los reclamos de cientos de miles de desocupados y trabajadores precarizados de todo el país”, se quejaron. En la ciudad realizarán un corte total en el acceso a la autopista Rosario-Buenos Aires desde las 9.
Se trata de una medida de fuerza del gremio La Fraternidad, que agrupa a los maquinistas de trenes "en defensa de la industria ferroviaria y de los puestos de trabajo", afirma la convocatoria.
El dirigente sindical y líder de los trabajadores gráficos de la provincia de Buenos Aires, afirmó además que no se puede bajo los "condicionamientos del FMI apostar a un crecimiento que dependa exclusivamente de quienes exportar más".
Las protestas habían comenzado el viernes, pero al no tener respuesta decidieron llevar adelante la medida de fuerza en la arteria sureña entre Ayolas y Uriburu. Esperan respuestas de la empresa o del Ministerio de Trabajo de la provincia de Santa Fe.