La CGT se reunirá esta semana con intendentes y con la Iglesia para continuar su «ronda de consultas» de cara al Comité Confederal en el que se definirá si se avanza en la realización de un paro nacional, aunque algunos dirigentes sindicales dijeron que serán «cautos» frente a esa decisión.

Tras reunirse con movimientos sociales, senadores y ministros del Gobierno, el sindicalismo recibirá el próximo lunes a intendentes peronistas y el miércoles a la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) para analizar la coyuntura y sumar apoyos a los reclamos de los trabajadores.

La agenda de reuniones continuará días después con encuentros con gobernadores peronistas y también diputados nacionales, para luego concluir en el Comité Confederal del 23 de septiembre en el que la organización sindical debatirá qué medidas tomar ante «la falta de respuestas» del Gobierno de Mauricio Macri.

«La CGT sigue construyendo más organización. Esta CGT va a ser constructora de consenso y acuerdos y también avanzar en las reivindicaciones en los derechos de sectores, no sólo de los asalariados a los que representamos, sino también los no asalariados, informales, cuentapropistas y los sectores populares que no la están pasando bien», remarcó el secretario general del gremio de canillitas, Omar Plaini, respecto a la «ronda de consultas».

A pesar de que afirmó que la CGT está «en condiciones» de hacer una medida de fuerza, el legislador nacional reconoció que «eso no va a resolver la cuestión» y explicó que estos encuentros con distintos sectores políticos y sociales buscan que «el Gobierno entienda que hay una acumulación de poder popular muy grande y que eso lo lleve a reflexionar».

Respecto al pedido de un paro nacional por parte de algunos dirigentes opositores, Plaini indicó que «hay sectores políticos y sociales que quizás están un poco apresurados porque algún interés pueden tener».

«No se le puede obviar a la CGT el grado de representatividad y la responsabilidad institucional que tiene, por eso somos cautos en algunas cosas, pero eso no quiere decir que no seamos firmes», subrayó.

Sin embargo, aclaró que «se van generando las condiciones cada día más, y podría decirse que ya están las condiciones, para tomar una medida de acción directa».

Por su parte, el secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de los Peajes y Afines (SUTPA), Facundo Moyano, aseguró que «no hay que apurar un paro» y pidió «responsabilidad por parte del movimiento obrero».

«Sería irresponsable de mi parte decir ´sí, hay un paro´. Lo que tenemos que hablar es de las condiciones, del escenario que hay. La situación llama a las organizaciones sindicales a tener una postura un poco más fuerte ante la falta de respuestas», admitió el diputado nacional.

Y agregó: «Tiene que haber responsabilidad por parte del movimiento obrero. Si el paro tiene que venir, va a venir por decisión de los dirigentes y trabajadores que ellos representan.

No hay que apurar un paro, ni responsabilizar a ciertos sectores del sindicalismo».

En consonancia con Plaini, el dirigente del Frente Renovador advirtió que «hay cuestiones que no van a cambiar, porque tienen que ver con una mirada ideológica del Gobierno» y señaló: «Si paramos, no va a cambiar la política económica del Gobierno».