La CGT se sumó este al reclamo para que se declare la «emergencia alimentaria» y le exigió al Gobierno que atienda «la grave situación social que atraviesan los ciudadanos sumergidos en la pobreza e indigencia» como consecuencia de «la inflación y la devaluación de la moneda local».

De esta forma, la central obrera se acopló al pedido que había iniciado el candidato presidencial de Consenso Federal, Roberto Lavagna, y que luego contó con el respaldo de organizaciones sociales como Barrios de Pie y la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), y por último de la Comisión Episcopal de la Pastoral Social Argentina y los intendentes peronistas del conurbano bonaerense.

«La Confederación General del Trabajo (CGT) solicita urgente atención a la grave situación social que atraviesan los ciudadanos de nuestro país sumergidos en la pobreza e indigencia», aseguró la central en el inicio del comunicado dirigido al presidente Mauricio Macri y firmado por sus dos secretarios generales, Héctor Daer y Carlos Acuña.

Al respecto, la CGT señaló que la «caída de los ingresos» de trabajadores, jubilados y beneficiarios de planes sociales a raíz de la inflación y la devaluación del dólar «registran en la actualidad una pérdida sin demasiados antecedentes en nuestra historia reciente».

Por eso, la central obrera planteó que «es obligación primaria, indelegable y constitutiva de todo Estado, el garantizar la alimentación y nutrición adecuadas a toda la población», por lo cual pidió al Gobierno tomar «medidas urgentes y extraordinarias» .

«Como no escapará a su elevado criterio, la crisis económica que ha estallado en las últimas semanas no ha hecho más que agudizar la grave situación social que venimos padeciendo.

Reclamamos la urgente declaración de la emergencia alimentaria y nutricional», agregó la dirigencia gremial en el escrito.