Arrancó el 2018 pero para algunos sectores no de la mejor manera. Por el contrario, lamentaron empezar el año con “malas noticias”. Tal es el caso de las panaderías, que argumentan fuertes subas en los servicios y en la materia prima, dificultando su normal funcionamiento.

Gerardo Di Cosco, presidente de la Asociación de Industriales, Panaderos y Afines de Rosario manifestó a Conclusión que “la situación es muy preocupante en la industria, muy complicada” porque “las tarifas han aumentado en forma exponencial y ahora nos encontramos con que aumenta la harina, la levadura, la margarina”.

Consultado sobre cuál será la influencia que tengan estos aumentos en el precio del pan, Di Cosco dijo que la suba en la materia prima no es el principal responsable, sino más bien la carga impositiva.

“Lo que hoy más inside en la estructura de costo del precio del pan es la parte impositiva. Cada vez es mayor la carga impositiva, es más dura, sobre todo en lo que refiere a los servicios”, dijo el especialista y en seguida precisó: “El aumento de la luz y el gas es salvaje y de hecho ya hay panaderías que se están retrasando en el pago de los servicios, o en las obligaciones patronales”.

No obstante, anticipó que el precio del pan subirá entre un 8% y un 12%. “Lamentablemente es necesario para palear un poco la situación”, apuntó.

Respecto a las ventas en el sector, Di Cosco dijo que “están planchadas” y que han caído un 30% de 2016 a 2017 y “no se han vuelto a recuperar”.

Asimismo, expresó que Rosario tiene otro agravante: la clandestinidad. “No pagan lo que tienen que pagar,  entonces estamos compitiendo con industriales que no están en la misma situación que la nuestra”, explicó.

Luego lamentó no tener el apoyo de la Municipalidad para corregir esta situación, “nadie quiere intervenir”, dijo Di Cosco y ejemplificó: “Hay panaderías que trabajan a puertas cerradas y están en forma irregular, y no podes competir con esa gente porque manejan otros números que los que enfrentamos nosotros”.

Además, recomendó tener cuidado con el consumo de tales productos porque “no están controlados, y siempre se puede correr riesgo en materia de salud”.

De cara a los meses venideros, el especialista no fue muy optimista ya que consideró que teniendo en cuenta “como se está presentando todo, y por lo que uno ve a diario, no creo que mejore”, sino que por el contrario, “el panorama cada vez se está complicando más”.

Según informó Di Cosco a Conclusión el año pasado se registraron alrededor de 300 despidos en Rosario y la región y “las horas extras se han recortado desde hace tiempo en muchas panaderías, algo que históricamente la industria jamás lo había hecho”.

“Es difícil decirle a una persona que no venga más a trabajar, porque son empresas chicas, familiares, son personas que te conocen de toda la vida. Lamentablemente no sabes cómo hacer, pero no queda otra, porque sino no le podes pagar”, señaló y a modo de ejemplo dijo que para las Fiestas no se ha tomado gente extra, sino que “se ha trabajado con la gente que uno tiene”.

No somos la excepción de nada de lo que pasa en el país, y lo más triste es que no podemos tomar ninguna medida porque a nivel nacional nadie te escucha”, cerró preocupado el empresario.

Hoy se reúne el consejo directivo de la Federación Argentina de la Industria del Pan en Capital Federal donde confluyen todos los presidentes de las provincias, a los fines de definir los alcances de las subas.