Por Aldo Battisacco

Tras la reunión de este lunes con la jueza Andrea Rodríguez Mentasty, del Juzgado N° 3 de Garantías de Vicente López, los trabajadores de Pepsico anunciaron una movilización con todas las organizaciones solidarias para este martes a las 9 al juzgado Federal de San Isidro.

En diálogo con Conclusión, el delegado de los trabajadores, Camilo Mones, manifestó que «en el encuentro con la magistrada se negó a otorgar las mínimas garantías de que no se llevará adelante un desalojo violento, pese a que se le informó que en la fábrica había trabajadoras y obreros que no pensaban abandonar su lucha por las amenazas de represión».

Ademas, Mones relató que «los abogados de los trabajadores explicaron la ilegalidad en que se encuentra la empresa» por «haber incurrido en el delito de lock out ofensivo al cerrar la planta previo a la apertura del Procedimiento Preventivo de Crisis».

Según expresó el delegado a este medio, «la denuncia se radicó en juzgado Federal de San Isidro» porque «es allí donde debería resolverse la situación de la fábrica». Los trabajadores entienden que la medida «pondría fin a la ilegalidad de la empresa».

En razón de estos fundamentos, Mones agregó que «los trabajadores de Pepsico solicitaron la incompetencia de la jueza Rodríguez Mentasty que no debería seguir con el caso y mucho menos ejecutar una orden de desalojo».

Pero lo que más asombró a los trabajadores «es que el pedido de desalojo solicitado por la patronal se basó en un supuesto peligro de contaminación que la planta tendría», afirmó Camilo Mones.

Y añadió: «Con esto la empresa aduce su propia infracción a la ley al mantener una planta supuestamente contaminante para justificar el uso de la fuerza contra los trabajadores».

Por último, el delegado de los trabajadores insistió en «la gravedad de la situación» y llamó a que «no se use la fuerza y la violencia contra los trabajadores y sus familias para resolver un conflicto laboral provocado por una multinacional que está fuera de la ley», concluyó.