Altos funcionarios militares iraníes advirtieron fuertemente a los Estados Unidos sobre las posibles consecuencias del anuncio de una guerra entre ambas naciones, e instaron a Donald Trump a que “se comporte de manera responsable para proteger la vida de las fuerzas estadounidenses”.

Según comentó el mayor general Gholamali Rashid (identificado por la Associated Press como comandante militar de alto rango) en un discurso en el centro de mando de la Guardia Revolucionaria Islámica (Cgri), si estallara una guerra, el alcance y la duración de dicho conflicto sería “incontrolable”, culpando a la “política intervencionista de Estados Unidos”.

Esta advertencia va en línea con la postura del Pentágono, que teme una represalia contra sus fuerzas en la región, pero que sin embargo han sido desoída por el presidente Trump, convencido de accionar.

Además, el vocero del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas Iraníes, general brigadier Abolfazl Shekarchi, aseguró que su país nunca será quien inicie la guerra, pero que están preparados para dar una “respuesta revolucionaria en Occidente y Asia Central” que no dejará “sobrevivientes” en caso de algún error del enemigo.

“Amenaza por amenaza significa que si el enemigo nos dispara una sola bala, recibirá diez balas y tendrá que pagar un alto costo”, señaló a la agencia Tasnim.

“Cualquier error militar de parte del enemigo, en particular de Estados Unidos y sus aliados regionales, sería equivalente a dispararle a un polvorín sobre el cual están situados Estados Unidos y sus intereses, e incendiaría en llamas la región que abrazaría a Estados Unidos, a sus intereses y sus aliados”, sostuvo.

Del otro lado, el Ministerio de Exteriores británico ha anunciado que el secretario de Estado para Oriente Próximo, Andrew Murrison, visitará el domingo Irán para abordar con altos funcionarios la situación en el Golfo.

Su viaje será para pedir una «desescalada urgente» de la crisis y trasladará la preocupación de Londres por el papel de Teherán en la región y su amenaza de dejar de respetar el acuerdo nuclear con el que el Reino Unido sigue totalmente comprometido», ha expresado en un comunicado Exteriores.