Mientras aún continuaban las tareas de búsqueda y rescate de las víctimas de Salta 2141, el edificio que explotó el 6 de agosto de 2013, otra tragedia conmocionó a la ciudad de Rosario: Florencia y Melanie Aranda, dos hermanas de 14 y 12 años, oriundas de la localidad santafesina de Rafaela, habían visitado la ciudad y, mientras disfrutaban de un paseo en la “vuelta al mundo” del International Park, la cabina en la que se desplazaban se soltó, y las menores murieron tras caer al vacío por unos veinte metros.
El accidente ocurrió en la tarde del 10 de agosto, unos minutos después de las 16 en el parque de diversiones ubicado en el Parque Independencia de bulevar Oroño y 27 de Febrero.
Según testigos del hecho, la cabina del juego llamado “Vuelta al Mundo”, una rueda de grandes dimensiones, se desprendió y cayó sobre las personas que aguardaban abajo en una plataforma para subir al divertimento.
En el episodio también resultaron heridas otras siete personas: dos mujeres de 36 y 43 años fueron internadas en el Hospital de Emergencia Clemente Álvarez (HECA) con diversas heridas, mientras que un niño de 3 años y una mujer de 30 fueron trasladados al Hospital Provincial.
Además, un joven de 23 años llegó con heridas al hospital Roque Sáenz Peña de Rosario y dos niñas de 10 y 8 años también fueron internadas.
Tras el episodio, el fiscal Guillermo Camporini había informó que “dos personas fueron detenidas” en el marco de la investigación que llevó adelante el juez Juan Carlos Curto: se trataba del dueño del parque y de un empleado que manejaba el juego al momento del siniestro.
Si bien el juez había convocado a un técnico para que pericie los juego y los materiales siniestrados, el director de Inspecciones de la Municipalidad, Gregorio Ramírez, señaló que el parque de diversiones había presentado un informe técnico favorable al 27 de junio y se encontraba habilitado y “con el seguro al día”.
“La rueda panorámica fue habilitada en 2007. La ordenanza que regula esto establece que cada seis meses tiene que haber un informe de un técnico firmado, sobre las cuestiones de seguridad, capacidad, y evaluación de cada uno de los juegos”, había detallado en ese momento Ramírez, quien además remarcó que el informe había sido presentado el 27 de junio y “evaluó que todas las estructuras del parque estaban funcionando bien”.
Falta de mantenimiento y ningún condenado
A pesar de las declaraciones de Ramírez, las pericias posteriores confirmaron que el Parque de Diversiones tenía falta de mantenimiento, por lo que la Municipalidad, liderada por Mónica Fein, decidió clausurar este espacio y separar al funcionario de su cargo.
En noviembre del 2013 –tres meses después del episodio– Ramírez fue imputado por el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público. En tanto, el apoderado del International Park y un empleado de 19 años, quien manejaba la Panorámica en el momento en que ocurrió la tragedia, fueron procesados bajo el delito de homicidio culposo.
En tanto, el juez Curto dictó la falta de mérito para el empleado del International Park y para otros funcionarios municipales, mientras que Osella fue beneficiado en febrero de 2016 con tareas comunitarias.
La probation contó con la conformidad de las familias de las víctimas, quienes fueron resarcidas económicamente.
En tanto, en su resolución del 27 de maro de 2016, el juez penal Ismael Manfrín absolvió a Ramírez, que era el único procesado que tenía el caso, al considerar que “no era posible que conociera de fallas o vicios internos, propios de diseño de la estructura metálica”.
