La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) denunció que durante las fiestas de Navidad y Año Nuevo hubo una “desprotección sanitaria” en Rosario y la región, ya que muy pocas ambulancias estaban preparadas para circular y atender emergencias. Además, advirtieron que esta situación se repite durante los días hábiles: tanto el SIES –de gestión municipal– como el SET –administrado por el gobierno de Santa Fe– tienen cada vez menos móviles en condiciones de asistir pacientes.

Las alertas ese encendieron durante el 24 y 25 de diciembre: según ATE, de las seis ambulancias del SET 107 en Rosario, Pérez y Villa Gobernador Gálvez, ninguna estaba habilitada para atender emergencias. Por parte del SIES sólo hubo cinco móviles circulando dentro de Rosario.

“El SET tuvo dos móviles sin funcionar en Rosario (9 y 14); dos móviles de Pérez y sólo uno con enfermero (es decir, soporte vital básico, pero que no resuelve emergencias médicas); y dos móviles de Villa Gobernador Gálvez, solo uno con enfermero pero sin médicos para accionar y tomar definiciones urgentes”, agregó el gremio.

Para conocer más sobre esta situación, Conclusión dialogó con el chofer de ambulancias y delegado de ATE dentro del 107 provincial, Daniel Albachiaro, quien detalló: “En lo que es Rosario, en el fin de semana de Navidad no hubo un solo móvil de emergencia de lo que es la provincia. De seis móviles que tenía que tener funcionando, solamente había dos con enfermero, que no son móviles para la emergencia médica, y ningún médico arriba. Para el 31 en Villa Gobernador Gálvez no hubo ambulancias hasta las 15 o 16, incluso hubo una persona con una herida de arma de fuego y no pudimos asistirla en la vía pública porque no estaba el móvil, y en Pérez había un móvil con médico”.

“Esto pasa todos los días, el servicio está en una decadencia que nunca se vio. Hace cinco años atrás los móviles de la provincia eran 8, y 6 tenían médicos, ahora el servicio funciona con menos que el mínimo, es un deterioro enorme, fue destructiva esta política hacia la emergencia pre-hospitalaria”, agregó Albachiaro.

En relación a la respuesta que dan las autoridades ante estos reclamos, el delegado de ATE sostuvo: “Hace una semana presentamos una nota para que nos reciba el director de la Red Provincial de Emergencias y Traslados que está en Rosario, que es una persona que podemos ver todos los días, y no nos recibe. Durante el año fuimos cuatro veces a la Casa de Gobierno en Santa Fe, al Nodo de Salud y al Ministerio de Salud, y nunca nos atendieron. El argumento que tendrán es que no hay un mango, pero después lees que a la provincia le sobran millones de pesos”.

“No hay inversión en el recurso. No hay móviles nuevos y no arreglan los que ya están, la cantidad de ambulancias es insuficiente y los vehículos no cumplen con las características para que podamos hacer guardias de 24 horas. Quedaron pocos móviles funcionando porque los que se rompen no se arreglan, no hay mantenimiento”, denunció.

Tras ser consultado sobre cuántas ambulancias circulan en Rosario actualmente, el delegado de ATE detalló: “De acuerdo a distintos autores, va un móvil de emergencia por 50.000 habitantes. En un millón y medio de habitantes, entre Gálvez, Pérez y Rosario, debería haber entre 50 y 30 móviles. Ahora no llegan a 9 móviles de emergencia. Hace cinco años atrás, sumando las dos administraciones, teníamos 16 o 17 móviles. La gestión municipal también se ha venido abajo”.

Si bien Albachiaro aseguró que se llegan a “atender todos” los llamados de emergencia que ingresan al 107, reconoció que “al haber pocos móviles el tiempo de atención es cada vez mayor”.

Sobre los insumos con los que cuenta cada ambulancia, el conductor ahondó: “Racionan todo. Te dan cinco paquetes de gasas o una botellita de agua oxigenada, nosotros usamos un montón de eso, el 90% de las personas que subimos al móvil están heridas. De las medicaciones que tienen que ver con la analgesia, dan poco y nada, y son importantes en pacientes que están críticos y tienen que ser sedados e intubados. Por otro lado usaron guita para contrataron móviles privados, que están perores que los del 107.

Falta de personal: otra pata del problema

Albachiaro también indicó que en los últimos meses muchos médicos que iban a bordo de las ambulancias dejaron sus trabajos debido a la precarización a la que eran sometidos. “En un mes renunciaron 7 u 8 médicos –apuntó– y después fueron renunciando de a dos o tres. Renunciaron porque son monotributistas, cobran salarios muy bajos, y si se enferman después tienen que devolver la guardia. Son personas que estudiaron para trabajar cómodas, y acá las condiciones de laburo son como las de La Forestal”.

Tras la ola de renuncias, para el delegado de ATE la situación laboral del SIES y el SET sigue siendo crítica: “Los médicos fueron reemplazados con enfermeros, y no hay un protocolo para enfermería en el pre-hospitalario. Está hecho para que sea el médico el que actúe. Tiran a los enfermeros a la calle y los someten a un montón de riesgos legales”.

Y agregó: “Otra cosa es la particularidad del lugar. Trabajamos en zona narco, donde nuestra vida corre un altísimo riesgo, y nunca han evaluado cuál es el riesgo de nuestro trabajo”.