La delegada de ATE-Ansés, Marcela Gentile, dialogó con “Conclusión” respecto de la adopción de medidas de fuerza originadas a partir de un incidente ocurrido el martes en la delegación de Sarmiento y Rioja.

Explico que, además del reclamo de seguridad para el personal, las demandas se extienden “a varias irregularidades más”, entre las que citó el mal estado de los edificios, la falta de un servicio de asistencia médica para usuarios y empleados, entre otros, que son temas a tratar en las próximas horas.

En horas del medio día se reunieron representantes sindicales con gerentes del ente y en la tarde se decidirá en asamblea si se sigue con las medidas, se profundizan o se levantan.

Gentile le señaló a “Conclusión” que Ansés, a nivel nacional, necesita más personal para abastecer la demanda. “El sistema está rebasado y no hay horizonte. Que no haya turnos en el Ansés no es culpa del personal”, explicó la delegada, y continuó diciendo que “el número de teléfono para turnos (130) está abarrotado, y la página web, cuando detecta que no hay capacidad humana para abastecer la demanda, automáticamente deja de otorgar turnos».

«Tenemos el mismo personal hace años. Hay muchos compañeros que se han jubilado y no se han repuesto esos puestos, y los que sí se han repuesto han sido políticos, es decir que no son operativos porque no están dentro de la estructura para atender”, denunció la delegada.

Explicó también que con los mismos recursos humanos que se tienen hace años, se está tratando de atender a todas las nuevas demandas, y “eso es imposible de aplicar correctamente,” explicó.

“No hay recurso informático tampoco, las máquinas se lentifican ante tanta demanda, se caen los sistemas, ni siquiera hay hojas o tonner (tinta para las máquinas). La gente se va muchas veces con la confianza que hizo el trámite porque no se puede imprimir un comprobante» comentó.

“La gente se enoja con los empleados de la entidad y no se dan cuenta que somos tan víctimas como ellos”, comentó Marcela. “Por ejemplo, los empleados de Ansés, si se enferman, a pesar de presentar el certificado les descuentan los días, es decir que no hay derecho ni a enfermarse. O sea que toda esta estructura, además de enfermar y agotar al trabajador, lo transforma en un ‘chivo expiatorio’  frente a la gente que llega creyendo que la Ansés le va a solucionar los problemas. Toda la estructura es una mentira, esto es simplemente una caja negra política”, agregó la delegada.

En un recorrido por las instalaciones del edificio de calle Rioja y Sarmiento, la delegada mostró a “Conclusión” el estado de las instalaciones, donde se pudo divisar por ejemplo, la salida de emergencia, cuya escalera está obstruida por mobiliario, oscura y sin señalizar. También denuncian que “en otras dependencias tienen plaga de ratas, y, en todos los edificios, falta mantenimiento general”.

Recordemos que esta medida tiene inicio ante un suceso violento ocurrido en esta delegación. Sobre el particular, la delegada habló del tema, y explicó de qué se trata el conflicto: “Estamos repudiando un hecho de violencia ocurrido con una supervisora que fue agredida verbal y físicamente por una beneficiaria de asignación universal”, dijo.

Momentos de después de los hechos de agresión, el personal decidió tomar la medida de fuerza de atención resentida, que según Gentile “no es un paro, es una medida de fuerza que reciente los tramites nuevos y las consultas en esa delegación, es decir que solo pueden ingresar aquellas personas que tengan turno con anterioridad”.